Tras casi 5 meses de rotundo éxito de público, finaliza hoy la exposición “Fernando Alonso Collection”, organizada por Canal de Isabel II Gestión, la Comunidad de Madrid y la Fundación Fernando Alonso.
Las espectaculares instalaciones del Centro Arte Canal, ubicado en Madrid, junto a la Plaza de Castilla, han acogido desde el pasado 3 de diciembre de 2013 la muestra más importante celebrada hasta ahora sobre la exitosa carrera deportiva del piloto asturiano.
Según nos ha informado la organización más de 150.000 personas han visitado la exposición, a la vez que cerca de 11.000 niños, de entre 3 y 12 años, han participado en los talleres infantiles gratuitos que se han impartido sobre seguridad vial o buenos hábitos deportivos además de otros dedicados a la alimentación, creatividad y aerodinámica.
La pasada semana, Coches.com pudo acudir a dicha exposición para comprobar “in situ” la expectación creada ante un evento sin precedentes dedicado a la carrera de un deportista de nuestro país. Y hemos de reconocer que lo que allí vimos nos gustó mucho.
Independientemente de los favoritismos personales de cada uno, es justo reconocer que Fernando Alonso ha marcado un punto de inflexión en el automovilismo deportivo en España, como ya hicieran antes, en otras especialidades, figuras como Carlos Sainz o Ángel Nieto. Indudablemente estamos ante uno de los mejores pilotos de la historia de la Fórmula 1 y uno de los más grandes deportistas españoles de todos los tiempos.
Desde el primer instante ya nos vimos imbuidos por un ambiente muy especial, ya que el recinto donde se llevaba a cabo la exposición, no podía estar mejor elegido. El Centro Arte Canal, es un magnífico y singular espacio, inaugurado en noviembre de 2004, que ocupa parte de uno de los antiguos depósitos subterráneos (situados a 9 metros de profundidad) del Canal de Isabel II, próximos a la Plaza de Castilla de la capital de España. Éstos datan de principios del siglo XX y en su interior podían almacenarse más de ciento cuarenta millones de litros de agua. Pero no menos importantes han sido la decoración o el especial cuidado por el detalle que se aprecia en cada una de las secciones.
En nuestro recorrido por esta muestra comenzamos accediendo a la zona denominada “KM 0”, donde se mostraban los inicios de Fernando Alonso en el deporte del motor, desde su primer kart (construido por su padre), al que se subió por vez primera con tan sólo 3 años de edad, pasando por los monos de competición, cascos o guantes que empleaba en aquellos años y, por supuesto, los numerosos trofeos que empezaba ya acumular en sus vitrinas como, por ejemplo, el de Campeón del Mundo de karts en la categoría júnior, en el año 1996.
Continuamos nuestra ruta por el siguiente espacio, bajo el título de “La Colección”, donde pudimos detenernos a observar los siguientes pasos en su carrera deportiva, cuando corrió con éxito en diferentes fórmulas de promoción (Fórmula Nissan, en el año 1999 o Fórmula 3000 en el año 2000) para, ya posteriormente, pasar a competir en la deseada Fórmula 1, a bordo de uno de los monoplazas de una escudería modesta como Minardi (en el año 2001) para luego dar el salto definitivo a algunas de las más punteras como Renault (de 2002 a 2006 y luego de 2008 a 2009), McLaren (2007) y Ferrari (desde 2010 hasta la actualidad).
Por supuesto, en esta zona no podían faltar los dos bólidos Renault, el R25 y R26, con los que consiguió hacerse con los Campeonatos del Mundo de Pilotos, en los años 2005 y 2006, así como los trofeos que acreditan dichos títulos.
No podemos pasar por alto uno de los más bellos y espectaculares monoplazas de la exposición, nos referimos al McLaren MP4-22, que pilotó en la temporada 2007 y que tantos recuerdos nos dejó a los aficionados, con sus encarnizadas y polémicas luchas con un joven Lewis Hamilton, aunque el título finalmente cayó en manos del piloto finlandés Kimi Räikkönen.
Para los que nos consideramos “Ferraristas” ha sido un auténtico placer el poder ver reunidos en un mismo espacio los monoplazas de Fórmula 1 que ha pilotado Fernando Alonso para la Scuderia de “il cavallino rampante”. Allí estaban los Ferrari F10 (2010) con el que a punto estuvo de convertirse nuevamente en Campeón del Mundo, en su debut con el equipo italiano; Ferrari 150° Italia (2011), que debe su nombre a la celebración del ciento cincuenta aniversario de la unificación de Italia; Ferrari F2012 (2012) y, por último, el Ferrari F138 (2013).
Unas cuidadas vitrinas exhibían los monos ignífugos que lució cada una de sus temporadas en las máximas categorías del automovilismo, junto con los cascos empleados, guantes, botines, además de la mayoría de los trofeos logrados. Sin duda una de las más admiradas es la que muestra la colección de cascos que donaron, con dedicatoria incluida, muchos de sus compañeros de profesión, pero con el que muchos de los visitantes querían fotografiarse era el del 7 veces Campeón del Mundo de Fórmula 1 Michael Schumacher, que aún continúa en coma tras su grave accidente esquiando en los Alpes franceses, el pasado mes de diciembre.
La siguiente sección, bajo el epígrafe “Circuito Alo”, estaba presidida en su zona central por una gran pantalla interactiva donde los aficionados podían conocer los datos de todas las carreras del piloto asturiano mostrados de forma amena, acompañados por diferentes vídeos e imágenes.
“Start your engines!” contaba con un espectacular montaje audiovisual con el que se trataba de acercar, en lo posible, al público de qué forma se vive un Gran Premio de F1 desde dentro.
El siguiente paso en este recorrido por la “Fernando Alonso Collection” lo constituía la F1 Experiences, donde los aficionados podían encontrar las explicaciones técnicas a algunas de sus dudas sobre el funcionamiento de los monoplazas de la máxima categoría del automovilismo, así como sobre los circuitos donde se compite.
La sexta y última zona de la exposición, “275.000 Km de Emoción”, consistía en un vídeo, mostrado en una pantalla gigante, donde Fernando Alonso hacía un repaso a algunos de los momentos más destacados de su dilatada carrera como piloto, con más de 29 años a sus espaldas.
También se han desarrollado diversas actividades educativas durante el transcurso de la muestra, como talleres didácticos para los más pequeños, donde se les explicaba de forma sencilla aspectos de la competición, del diseño de los monoplazas, la aerodinámica, etc., a la vez que se hacía especial hincapié en temas tan importantes como la seguridad vial y los hábitos de vida saludables.
Tampoco podía faltar, para finalizar el recorrido y justo antes de la salida, un lugar destinado al merchandising, donde los visitantes podían adquirir objetos de la más diversa índole relacionados con la trayectoria del piloto asturiano: desde posters y fotografías, pasando por tazas, cuadernos, bolígrafos, miniaturas, libros, el catálogo de la exposición, etc. Pero lo que, sin duda, se llevaba la palma eran las camisetas, gorras y cazadoras de su actual equipo, que los aficionados venidos de los más diversos lugares de España y de diferentes países del mundo, adquirían con verdadera fruición.
En resumen una grata experiencia para todo aficionado al mundo del motor que se precie de serlo.
Galería de fotos:
1/41Fotos
