De auténtica sorpresa podíamos definir la asociación entre MINI, la marca inglesa propiedad de BMW, con Carrozzeria Touring Superleggera, los históricos diseñadores y carroceros que trabajan en Milán desde 1926. Ambos han diseñado y construido un modelo único y elaborado artesanalmente, que mezcla la tradición de la construcción clásica con el auténtico estilo británico de la marca. Se trata del MINI Superleggera Vision, un exclusivo vehículo biplaza con un diseño que enamora
Este MINI Superleggera Vision Lejos ha sido descubierto en un lugar tan bello como el coche. Fue en Villa d’Este, a la orilla del Lago Como en Italia, un lugar donde el grupo BMW ha presentado otros años concept tan exclusivos como el BMW Pininfarina Gran Lusso o el BMW Z4 Zagato. La asociación con carooceros de renombre se da en esta ocasión Carrozzeria Touring Superleggera, que recordarás por el artesanal Disco Volante, un deportivo que toma la base de una pieza tan exclusiva como el Alfa Romeo 8C.
Combinar un diseño británico atemporal como el del MINI con rasgos estilísticos puramente italianos podría dar lugar a un pastiche. Nada más lejos de la realidad. En las grandes placas de aluminio trabajadas a mano se respira aire mediterráneo, pero se conservan rasgos muy MINI, como la batalla larga y los voladizos cortos. También los dos faros circulares y una parrilla hexagonal. Pero Superleggera Touring le ha dado un aire clásico a todo ello, con un capó que evoca clásicos roadster británicos de antaño.
La carrocería se ha construido con grandes planchas de metal, lo que da lugar a una imagen muy cerrada y potente. Luego destacan los detalles como las llantas o los retrovisores alargados de aluminio pulido, pintados, como el resto de la carrocería, de un color especial, el «Como Blue».
En la trasera destaca la aleta posterior, una extravagancia que define bien a la marca y al carrocero. En esa zona también destacan las insólitas ópticas, diseñadas en forma de Union Jack, la bandera de Gran Bretaña, dividida en dos. Sirven para remarcar el origen del coche… y para lucir tecnología LED. El difusor CFRP da el toque final de la trasera con un estilo deportivo.
En su interior todo está pensado para el disfrute del conductor, con un puesto de conducción minimalista. Se ha querido respetar y «contar» cómo se creó el automóvil. Así, muestra las planchas de aluminio sin tratar (como en el salpicadero, que se ha dejado en el estado en el que se vería la carrocería sin la pintura). Un volante deportivo de tres radios y los elementos estructurales de las puertas, que también forman una Union Jack, completan el conjunto.
El panel de instrumentos, en medio del salpicadero, se basa en el de diseño MINI y se ha extendido al MINI SuperleggeraTM Vision para incluir un controlador táctil y dos instrumentos circulares con bordes de metal a la derecha. Además del reloj analógico en el borde derecho, el segundo instrumento enmarcado activa la cámara, integrada entre el conductor y el asiento del pasajero de delante. Es la encargada de capturar esos momentos que valen la pena en la carretera.
Se sabe que su mecánica será eléctrica, pero MINI aún no ha desvelado nada al respecto. ¿Puede que bajo la carrocería de este Mini Superleggera Vision se oculte la futura motorización del nuevo Mini eléctrico? Más allá de este apartado mecánico, lógicamente un coche así jamás verá la luz. Sin embargo, sabemos que desde hace años se especula que los MINI Roadster y Coupe, podrían ser sustituidos por un nuevo deportivo de tracción delantera (hay incluso recreaciones muy pintonas).
De este modo, la marca mantendría al Mini Cabrio en su catálogo y, este nuevo descapotable biplaza que pasaría a competir con el futuro Mazda MX-5 (que compartirá plataforma con un modelo de Fiat). Se podría ofrecer con capota blanda o con techo duro. ¿O juega BMW al despiste y tras este bello se esconden las líneas maestras de un futuro BMW Z2, que pasaría a ser el roadster más pequeño de su gama? Ya hay quien asegura que podría ver la luz el año que viene…
Fuente: MINI
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