Hay que reconocer que Nissan ha echado el resto en el Salón de Tokio. Presentó allí los Nissan GT-R Nismo y el GT-R 2014, además de un concept tan sorprendente como fabuloso, el BladeGlider Concept… ¡que llegará a producción! Con todo este despliegue no esperábamos más novedades en lo que respecta a deportivos… y fue entonces cuando apareció el Nissan IDx Concept, con su correspondiente versión Nismo al lado, y todo empezó a encajar.
El jefe de diseño de Nissan había puesto a los Toyota GT 86 y Subaru BRZ en el disparadero cuando los catalogó como coches “diseñados para alguien en la crisis de la mediana edad» y señalaba que los próximos deportivos de Nissan trataría de conquistar a los jóvenes de 20 años. Su respuesta, además del BladeGlider, son estos IDx Freeflow, un coche desenfadada y enfocado al uso diario, y su versión deportiva y futurista, el IDx NISMO.
Según Nissan, ambos concept cars han sido desarrollados para satisfacer a los clientes más jóvenes nacidos después de 1990, la generación digital. De ahñí su nombre, que significa “identificación”, en el caso del acronismo ID, y de la “x”, que es la variable que representa los nuevos valores y sueños nacidos a través de la comunicación.
Las versiones finales de los dos conceptos han nacido de la implicación de dos comunidades de co-creación separadas. Aunque ambos mantienen su configuración de tres volúmenes (están basados sobre la misma plataforma), la idea era que el IDx pudiese tener distintas apariencias.
Nissan IDx Freeflow
Un largo morro y una zaga muy corta que comienza en un peculiar pilar posterior. Así es la silueta de este concept, en el que podemos ver detalles típicos de otros coches japoneses del pasado, como la parrilla frontal de diseño estrecho y horizontal, los retrovisores sobre el capóo las llantas de cuatro radios dobles.
Los detalles interiores de este concept car de cuatro plazas combinan funcionalidad, confort y modernidad. Está pensado para dar la sensación de ser un salón dentro de un coche, para que el conductor y sus amigos se pueden relajar. Cuenta con acabados en metal pulido en el panel de instrumentos (donimado por un enorme reloj retro) y la consola. El tapizado tipo jeans destaca en asientos y algunas otras zonas.
Nissan apunta a que el concept puede montar mecánicas de gasolina de 1,2 a 1,5 litros combinadas con una transmisión automática de variador continuo, como si de un Nissan Micra se tratase.
Nissan IDx Nismo
La variante Nismo comparte medidas con su hermano pero con variaciones para demostrar que estamos ante una versión deportiva: Retrovisores redondos, difusor posterior, toma de aire sobre el capó con paneles de carbono, alerón sobre el techo y unas salidas de escape laterales. También se ha pensado en otros detalles como las llantas negras de 19 pulgadas (con neumáticos 225/40) o la doble franja roja que lucían antaño los clásicos de competición de la marca.
También cambia el cuadro de instrumentos y las tapicerías en un interior donde domina el rojo, el blanco y el negro, con mil inserciones de metal. Hay detalles que rezuman competición, como los tiradores de las puertas o el volante achatado por la base y por la parte superior o la palanca de cambios.
Nissan habla de un motor turbo de inyección directa de 1,6 litros con una transmisión automática CVT deportiva o con caja de cambios manual de seis velocidades y control de revoluciones sincronizado.
Fuente: Nissan
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