Logo de Noticias Coches
anciana equipamiento coche tecnologico – 1
Luis Ramos Penabad

Tecnología que no debes montar en el coche (porque quizá no la uses)

Una de las frases más repetidas de los últimos meses, cada vez que cubrimos el lanzamiento de una novedad es «con mucha más tecnología». Y es cierto. Los coches han aumentado muchísimo su contenido tecnológico, gracias a la minituarización de componentes, la bajada de precio de los mismos y todas las posibilidades que aporta Internet aplicada a los coches.

¿Pero realmente se trata de tecnología útil? Para descubrirlo vamos a utilizar los resultados del estudio Driver Interactive Vehicle Experience (DrIVE) Report, de JD Power. En él, señalaban que un 20% de los compradores de vehículos nuevos nunca ha utilizado 16 de 33 tecnologías que equipaba su automóvil.

No se trata de un asunto baladí, ya que estas tecnologías no son gratuitas, ni mucho menos. El estudio encuestando a 4.200 propietarios sobre sus nuevos coches durante los primeros 90 días de uso. A pesar de que son en Estados Unidos, los resultados pueen extrapolarse a Europa. Estos son las cinco tecnologías que menos se utilizan:

  • Asistentes de búsqueda de negocios, como restaurantes y gasolineras (43%)
  • Router integrado (38%).
  • Sistema de aparcamiento automático (35%).
  • Head-Up Display (33%).
  • Aplicaciones integradas en el equipo de infoentretenimiento (32%).

Si analizamos detenidamente cada una de ellas, vemos que tres de ellas tienen una explicación bastante clara: se trata de tecnologías con las que ya cuentan los teléfonos móviles, aparatos que estamos bastante más habituados a emplear y sabemos cómo funcionan.

A cualquiera de nosotros nos resultará más sencillo y rápido buscar un restaurante o gasolinera (incluso utilizando el asistente por voz), usar el móvil como un punto de acceso WiFi para conectar otro dispositivo o usar aplicaciones  con un objetivo específico.

En este sentido, puede influir el hecho de la novedad (la gente lleva apenas tres meses con su vehículo nuevo), pero JD Power también llega a la misma conclusión: el coche que quiere ser móvil no va a ser mejor que un móvil.

Añadimos también, nosotros que probamos coches habitualmente, un tercer factor: la usabilidad de algunos de estos sistemas de infoentretenimiento deja mucho que desear, incluso para quienes estamos habituados a toquetear aparatos electrónicos. Hay que añadir un obstáculo que deben salvar los fabricantes: el coche debe ser conducido y está en movimiento la mayor parte del tiempo. Debe ser sencillo de usar y seguro hacerlo en marcha.

JD Power señala también a las marcas y a sus vendedores, que no siempre explican a los clientes los sistemas que incorpora el vehículo o la necesidad de activar algunos de ellos. «Los primeros 30 días de uso del automóvil son críticos a la hora de establecer esa relación tecnológica», señala Kristin Kolodge, responsable del área en la consultora. Tampoco aprueban Apple o Google pues el estudio indica que los sistemas operativos que las dos tecnológicas han desarrollado específicamente para el automóvil están en el listado de elementos que muchos clientes «no quieren en su próximo coche». De nuevo la gente prefiere emplear esas cosas en el coche.

Más allá de estos asistentes virtuales que ofrecen algunas marcas a través de sus call center (utilicé uno durante la prueba del BMW X6 2015), nos ha llamado la atención que no se utilicen otros sistemas en principio muy útiles, como el sistema Head-up display que proyecta datos sobre el parabrisas (si bien hay estudios que cuestionan el aumento de seguridad) o los automatismos de ayuda al aparcamiento.

Los sistemas más aceptados y demandados son sistemas de seguridad como el aviso de ángulo muerto, la frenada de emergencia, el control de crucero adaptativo o los que diagnostican el estado del coche, si bien vienen integrados y no se gestionan a través de una conexión externa.

¿Qué debería hacer el comprador de coche? Pues a veces poca cosa, ya que las marcas, para facilitar la elección de versión del vehículo, creen diferentes líneas de equipamiento cerradas, sin que se puedan elegir muchos equipamientos concretos (te obligan a elegir un acabado alto porque te interesa un elemento… y tienes que llevarte otros de los que prescindirías). Esto es más habitual en marcas generalistas no europeas, ya que fabricar a demanda aumenta los costes. Otros fabricantes, sobre todo los alemanes y las marcas premium, optan porque el cliente seleccione un acabado y luego incluya los elementos de equipamiento como extras.

A la hora de comprar un coche nuevo es clave equiparlo bien para poder venderlo después en el mercado de segunda mano antes y a un precio más elevado y evitar que se deprecie más. Eso sí, conviene saber cuáles son los elementos de equipamiento más demandados. Por eso, conocer qué utiliza la gente (y qué no) es esencial y este estudio nos da una pista muy importante: apostar por equipamiento de seguridad y solamente por el tecnológico cuando sepamos que nosotros vamos a sacarle realmente partido.

Para acabar de decidir el equipamiento en el coche, nada mejor que interesarnos por cómo funciona. Apuesta por sistemas que son intuitivos en un primer momento y huye de aquellos que complican la vida al volante (que aumentan la inseguridad, porque pueden distraer, algo que saben las aseguradoras). Ten en cuenta que a veces la tecnología también puede aumentar el coste de las reparaciones. Por ejemplo, sustituir un paragolpes con sensores de aparcamiento o una cámara será más caro que cambiar uno normal, del mismo modo que necesitará más mano de obra cambiar la luna de un parabrisas con sensor de luces y limpiaparabrisas, capaz de leer señales de la carretera e identificar a peatones y ciclistas…

Fuente: JD Power

  • equipamiento
  • tecnología
¿Te ha gustado esta noticia?Suscríbete y no te pierdas las últimas novedades cada semana