La semana pasada hablábamos de que BMW denominaría a sus modelos híbridos enchufables como BMW iPerformance. Pues bien, ya conocemos que los encargados de inaugurarla serán las berlinas de lujo híbridas enchufables del nuevo BMW Serie 7 2015. Habrá tres variantes, el BMW 740e iPerformance, BMW 740Le iPerformance (la versión de batalla larga) y el BMW 740Le xDrive iPerformance (con tracción total).
Tienen muy pocas diferencias estéticas con otras versiones. La más destacada es la conexión para recargar la batería, bajo una tapa en el lado izquierdo del coche, delante de la puerta delantera. El conector se encuentra en una posición elevada para que resulte más cómodo, cuenta BMW.
Dentro también hay cambios muy sutiles. Apenas se deistingue porque incluye la tecla eDrive y por las indicaciones gráficas específicas que pueden apreciarse en el tablero de instrumentos y en la pantalla Control Display.
El conjunto propulsor consta de un motor de gasolina de cuatro cilindros de 2 litros sobrealimentado de 258 CV y 400 Nm de par mçaximo disponible de 1.250 hasta 4.800 rpm. Va ligado a un motor síncrono eléctrico, integrado en la caja de cambios Steptronic de ocho marchas, con 83 kW/113 CV de potencia y un par máximo de 250 Nm es inmediata. Además de mover el coche, es también un alternador que, según la función híbrida activada, funciona mediante la energía recuperada durante las fases de frenado o alimenta de enería a la batería si se activa el modo de carga.
La potencia total del sistema es de 240 kW/ 326 CV, así como un par máximo total de 500 Nm, lo que permite que el BMW 740e iPerformance, acelere de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos (o,1 segundos más con batalla extendida). Pero más que por prestaciones destaca por consumo. Aún pendiente de homologación, anuncia 2,1 l/100 km y unas emisiones de 49 g/km de CO2. Si se elige con tracción total, el BMW 740Le xDrive iPerformance, que usa un sistema similar al BMW 225xe, sube un poco el consumo (2,3 l/100 km y las emisiones 54 g/km de CO2), pero mejora la aceleración a 5,5 segundos.
El BMW 740e iPerformance y su versión alargada pueden recorrer en modo eléctrico hasta 40 km (se reduce hasta 37 km con la tracción total), hasta 140 km/h. El motor de combustión aporta su potencia sólo si se solicita mediante el acelerador. En condiciones normales, sin que el conductor deba hacer nada, con modo AUTO eDRIVE, gestiona por si mismo ambos motores, optimizando eficiencia y dinamismo. Eso implica prioirizar el eléctrico a bajas y medias velocidades. Pulsando un botón puede elegirse circular exclusivamente el eléctrico MAX eDRIVE. Como es habitual en los híbridos enchufables, puede reservarse energía eléctrica para conducir más tarde sólo con el motor eléctrico.
También los modelos híbridos enchufables de la nueva serie 7 de BMW incluyen de serie una tecla de nueva configuración para el uso de la función Driving Experience Control. Pulsando la tecla, varían los reglajes para optimizar dinamismo, confort o eficiencia. BMW nos dice que «la diferenciación entre los modos Eco Pro, Comfort y Sport es más marcada que en el caso de los modelos con sistema de propulsión convencional».
La batería de iones de litio tiene una capacidad bruta de 9,2 kWh (neta de 6,9 kWh) va montada bajo del asiento y roba algo de espacio al maletero, que se queda en 420 litros de capacidad (un BMW Serie 5 convencional llega a los 515 litros). Puede recargarse en una toma de corriente covencional en cuatro horas una BMW i Wallbox de mayor intensidad en tres. La marca ofrece el servicio ChargeNow (dentro de BMW 360° Electric, que ofrece acceso a estaciones de recarga asociadas y pagar la energía consumida cada mes).
El equipamiento de serie es muy completo. Tanto el BMW 740e iPerformance como los BMW 740Le iPerformance y BMW 740Le xDrive iPerformance contarán con faros de LED, llantas de 19 pulgadas con neumáticos run flat, llave BMW con display, kit de navegación ConnectedDrive, integración del smartphone (con cargador por inducción), pantalla de a bordo Control Display con superficie táctil, sistema de mando iDrive con control por gestos de BMW, así como calefacción y refrigeración estacionarias (que permiten calentar el vehículo antes de subir).
No falta la tecla eDrive con programas de conducción específicos, cambio deportivo automático Steptronic de 8 velocidades con levas en el volante, control de crucero con función de frens, suspensión neumática en ambos ejes con Adaptive mode, accionamiento automático del portón trasero, cámara de visión trasera, sensor de lluvia y luces, sistema de navegación Professional, conexión ampliada para Smartphone (Bluetooth + USB), punto de acceso Wi-Fi…
Dentro del equipamiento de serie se incluye el cable de carga para una toma de corriente doméstica, que se guarda en una bolsa en el maletero. Los asientos son fabulosos, con calefacción en los delanteros, con tapicería de cuero y ajustables electrónicamente con fucnión de cuero De serie, sí, pero pueden mejorar con la opción Executive Lounge. La versión de batalla larga contará con techo de cristal eléctrico.
También habrá una amplia gama de sistemas de asistencia a la conducción, como la nueva generación de la pantalla virtual BMW Head-Up Display, asistente de aparcamiento, función de vista panorámica Surround View… Y Los modelos híbridos enchufables de la nueva serie 7 de BMW también pueden incluir opcionalmente un kit deportivo M, el diseño Pure Excellence para el interior y el exterior, la luz de rayos láser que estrenó el BMW i8 y, por supuesto, los acabados estéticos de BMW Individual Design.
El BMW 740e iPerformance tiene un precio de partida de 103.455 euros,mientras que la variante de batalla extendida, 110.900 euros. Es un precio muy cercano al BMW 740d xDrive, que cuesta 105.943 euros, con 320 CV y tracción total. Para que no quepan dudas sobre la nueva tecnología, la marca ofrece gratuitamente cinco años de mantenimiento incluido o 100.000 km y la garantía ampliada a tres años
Fuente: BMW
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[NOTA: Artículo publicado originalmente el 28/02/2016, ampliado con equipamiento y precios para España]