Hay pocos coches que tengan el carisma del Ford GT. La reinvención del superdeportivo americano por excelencia no dejó a nadie indiferente y desde su lanzamiento en 2017 ha levantado suspiros en todo el mundo. Ahora que se acerca el final de su producción, hemos podido ir viendo algunas ediciones especiales que hacían referencia a algunas gestas en competición en la década de los 60. El último en llegar ha sido el Ford GT ’64 Prototype Heritage Edition.
En este caso la premisa es muy clara, es un homenaje al primer prototipo del Ford GT que salió hace ya más de medio siglo. Recibe la misma decoración que llevaba aquél ejemplar que debutó en el Salón de Nueva York un 3 de abril de 1964, levantando expectativas desde el principio. Con el tiempo. Desde 1963 se fue gestando este proyecto con el que poder plantar cara a Ferrari en las 24 Horas de Le Mans, llegando a materializarse en ese primer prototipo.
Se hicieron cinco prototipos del Ford GT inicialmente para ir mejorando su rendimiento. El expuesto en Nueva York fue el chasis GT/101, aunque ese ejemplar y el GT/102 fueron desechados después de las pruebas de choque. Después llegaría el GT/103 con el que Ken Miles y Lloyd Ruby ganaron en Daytona en 1965. El GT/104 quedó en tercer puesto con Bob Bondurant y Ritchie Ginther al volante. Curiosamente, el GT/105 es el único de los prototipos que se mantiene con la decoración original, pues los dos anteriores fueron repintados.
Esa decoración es precisamente la que se plasma en el Ford GT ’64 Prototype Heritage Edition, que lleva la carrocería pintada en color blanco Wimbledon. La triple franja transversal y otros detalles van en color azul Antimatter, mientras que otros componentes como el splitter, los faldores o el difusor trasero son de fibra de carbono. En esa lista hay que incluir las llantas de 20 pulgadas, que son de carbono y tienen el acabado azul. Las pinzas de freno Brembo van lacadas en plata y tienen la inscripción en negro.
En el interior también se aprecia un protagonismo de la fibra de carbono, incluyendo los fantásticos asientos deportivos. Éstos van recubiertos en la tapicería Lightspeed Blue Alcántara con costuras en plata y el logotipo GT estampado. Ese material se repite en varias zonas del habitáculo, al igual que el cuero para ciertos detalles. Lo que no cambia en este modelo de edición limitada es su mecánica.
Como en el resto de Ford GT, se emplea el V6 biturbo de 3.5 litros con 669 CV y 746 Nm de par, que va ligado a una transmisión automática de doble embrague y siete velocidades. Este ejemplar es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, de 0 a 200 km/h en 11 segundos y llegar hasta una velocidad máxima de 347 km/h.
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