El Mercedes-AMG Project One fue presentado en 2017 como la máxima expresión de trasladar toda la tecnología de los monoplazas de Fórmula 1 de la marca a las calles. No era tarea fácil ser capaz de llevar esa idea a las calles, pero los ingenieros de la marca alemana lo han conseguido con la estrecha colaboración con los especialistas del equipo de competición en Brixworth, Gran Bretaña. Conozcamos a fondo el Mercedes-AMG One 2022.
Estilísticamente hablando, se ve casi idéntico al primer prototipo, conservando la toma de aire integrada en el techo y la aleta de tiburón, las rejillas activas en las aletas frontales, las puertas de apertura de mariposa y el alerón trasero móvil. Una mirada más cercana revela que la parte trasera se ha rediseñado ligeramente con un labio más prominente sobre las luces traseras LED y que hay algunas diferencias en el difusor trasero, que alberga unas salidas de escape triples inspiradas en los coches que compiten en la categoría reina de la automoción.
Otros cambios incluyen las cubiertas del motor practicables de fibra de carbono que integran unas grandes tomas de aire (NACA) y unos espejos retrovisores más generosos. Más evidentes son las llantas de aluminio forjado de 10 radios que cuentan con una cubierta aerodinámica de fibra de carbono . Esas ruedas están diseñadas exclusivamente para esta máquina, pero al estilo típico de Mercedes, también están disponibles en opción unas llantas forjadas de magnesio de nueve radios con un diseño biónico patentado y con la misma cubierta parcial.
Pasando al habitáculo, los diseñadores de Mercedes eligieron la estrategia de la forma sigue a la función, asegurándose de tener todo donde tiene que estar. Los delgados asientos buquet se fusionan en el túnel central, siendo una extensión del monocasco de fibra de carbono, mientras que sus respaldos se pueden ajustar en dos posiciones. El volante de estilo F1 cuenta con luces de cambio y botones integrados, y se ajusta eléctricamente. La caja de pedales y el reposapiés del pasajero se ajustan mecánicamente, ya que los asientos están fijados al chasis.
Mercedes-AMG One. Motor
Esta es el gran maravilla del Mercedes-AMG One. Tras los asientos se esconde un bloque V6 de 1.6 litros derivado de la unidad de potencia empleada de los monoplazas que la compañía lleva utilizando en la Fórmula 1 desde 2014. Este corazón mecánico se combina con una batería de 8,4 kWh enfocada puramente a mejorar las prestaciones, dado que alimenta a un total de cuatro motores eléctricos.
La unidad de gasolina produce 574 CV a 9.000 rpm y puede girar a un máximo a 11.000 vueltas. Respaldado por el MGU-K (término usado en F1 para referirse al motor eléctrico) montado en el cigüeñal, el tren motriz suma 163 CV más, mientras que el MGU-H (el motor del turbocompresor eléctrico) aporta 122 CV. A eso hay que añadir el par de unidades eléctricas del eje delantero, que entregan 326 CV combinados. En total, estamos hablando de 1.063 CV que quedan bajo el control de cuatro ruedas motrices y una autonomía eléctrica 18,1 kilómetros.
Gracias al sistema de tracción total AMG Performance 4Matic+, que es totalmente variable, y la caja de cambios manual automatizada de siete relaciones, los 1.695 kilos de masa en orden de marcha pueden llegar hasta los 100 km/h en 2,9 segundos, hasta los 200 km/h en 7 segundos y hasta los 300 km/h en 15,6 segundos. La velocidad máxima está limitada electrónicamente a 352 km/h. Por su parte, Mercedes también se jacta de un irrisorio consumo medio de 8,7 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 198 g/km, increíble para un motor de Fórmula 1.
Aunque ayudan los cuatro convertidores catalíticos de metal precalentado, dos convertidores catalíticos de cerámica, dos filtros de partículas de gasolina y un silenciador de titanio. Por su parte, la batería solo se puede cargar a una potencia máxima de 3,7 KW con corriente alterna, aunque también es posible rellenarla mediante la frenada regenerativa o utilizando la energía creada por el motor de combustión interna. La entrega de energía eléctrica se gestiona de la forma más óptima en función del modo de conducción seleccionado, divididos en:
- Race Safe: programa por defecto. Arranca en eléctrico y el motor de combustión se enciende si el conductor solicita más potencia.
- Race: modo de conducción híbrido con una estrategia especial de carga. El motor térmico está siempre en marcha y puede cargar la batería para disponer de la máxima potencia eléctrica.
- EV: modo eléctrico exclusivo.
- Race Plus (solo en circuitos): funciones aerodinámicas activas, disminución de la altura del tren de rodaje en 37 mm delante y 30 mm detrás, suspensión más rígida, y una gestión especial de la energía.
- Strat 2 (solo en circuitos): a lo anterior se suma una armonización aún más rígida del tren de rodaje y entrega la máxima potencia de todos los propulsores.
- Individual: ajustes personalizados de acuerdo con las preferencias particulares para los modos de carretera.
En el aspecto estructural, el Mercedes-AMG One está basado en un chasis monocasco de fibra de carbono con un subchasis delantero y trasero de aluminio. La suspensión coilover tiene cinco brazos y dos puntales de suspensión ajustables en cada eje, y se puede configurar en Comfort, Sport y Sport+, con esta última bajando la parte delantera en 37 milímetros y la parte trasera en 30 mm, lo que beneficia el manejo y la aerodinámica. También hay una función de elevación del eje delantero para conducir sobre las rampas y badenes de la vía pública.
Las ruedas ligeras que mencionábamos más arriba están calzadas con neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2R M01 hechos a medida, con unas cotas de 285/35 ZR19 delante y 335/30 ZR20 en la parte posterior. El ligero sistema de frenos de compuesto cerámico y fibra de carbono consta de discos delanteros de 398 mm con pinzas de seis pistones y discos traseros de 380 mm con pinzas de cuatro pistones. Todos ellos están ventilados internamente y perforados.
Mercedes-AMG One. Equipamiento
Las comodidades del Mercedes-AMG One incluyen dos puertos USB, una pareja de pantallas independientes de 10 pulgadas para el cuadro de instrumentos y la pantalla táctil del sistema multimedia, climatizador y un espejo retrovisor digital que muestra imágenes en tiempo real de la MirrorCam, ya que no hay parabrisas trasero. En términos de materiales, la fibra de carbono expuesta está por todas partes, combinada con cuero Nappa y tapicería de microfibra Dinamica negra y detalles metálicos, aunque se puede personalizar.
Mercedes-AMG solo producirá 275 unidades del One, y todas ya se están vendidad a un precio de 2,5 millones de euros cada una.
Fuente: Mercedes
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