Hace unas semanas proponíamos la Ruta de los Castillos de Alemania para dar a conocer alguna de las rutas que más vale la pena en el país germano. En esta ocasión nos hemos trasladado unos cuantos kilómetros al sur y hemos creado una ruta para conocer el norte de Italia.
La ruta inicia su recorrido en Milán ya que es uno de los aeropuertos más baratos de la región. Si cogemos el vuelo con tiempo y no escogemos temporadas altas para viajar, nos puede costar entre 30 y 40 euros ir y volver. El único inconveniente es que el avión nos dejará en Bergamo, que está a una hora en autobús de Milán, así que tendremos que coger un autobús. Dejamos aquí un elnacepara poder reservar los billetes por internet, aunque comprarlos en el propio aeropuerto te costará 5 euros.
Recomendamos no alquilar un coche para ir a Milán. Se trata de una ciudad grande y encontrar sitio para aparcar puede resultar bastante complicado.
Día 1: Milán
Recomendamos pasar en Milán al menos dos días. Es cierto que los monumentos y sitios más relevantes se pueden visitar en un día, aunque es una ciudad con un gran ambiente y realemente recomendamos pasar al menos una noche para poder salir a tomar «el aperitivo» o disfrutar de una típica pizza italiana en alguna trattoria.
Día 2: Lago di Como
Se encuentra a 84 kilómetros de Milán y en esta ocasión si recomendamos alquilar el coche. Es una zona bastante pequeña que podemos visitar en un día e incluso en una mañana, aunque recomendamos coger aquí el hotel ya que está zona es bastante más baratas que los pueblos de alrededor.
Día 3 y 4 : Pueblos de cuento en Italia
En los alrededores del Lago di Como encontramos bastante pueblos que realmente merecen la pena visitar. Se trata de pueblos pequeñitos, alguno a las orillas del lago y otros un poco más alejados, aunque ninguno se encuentra a más de 50 kilómetros del Lago di Como. Algunos de ellos no llegan ni a los 4000 habitantes, aunque son lugares que vale la pena visitar y poca gente hace una parada en ellos. Algunos de estos pueblos son: Nesso, Varenna, Brienno, Bellagio, Menaggio o Cernobbio. Dejamos una pequeña galería para que se vea la autenticidad de estos pueblos y por qué merece la pena visitarlos
Día 5: Venecia
Se encuentra a 350 kilómetros kilómetros del Lago di Como por lo que también recomendamos pasar aquí la noche. Habrás oido mil cosas de Venecia: Que si esta lleno de gente, que si huele mal, que si hay mucha humedad… puede que esto sea cierto, pero lo que estamos convencidos es que es, seguramente y bajo nuestro punto de vista, una de las ciudades más bonitas de Europa.
La ciudad se levanta sobre el mar, con lo que no hay coches ni autobuses, todo desplazamiento que queramos hacer. Venecia se divide en «dos partes»: La zona más industrial donde vive la mayoría de la gente y no tiene canales, sino carreteras normales; y la zona turística, la de los canales. Sinceramente es una ciudad muy recomendable y que, aunque haya que hacer una pequeña desviación de nuestra ruta inicial, sin duda vale la pena.
Día 6: Verona
Entre Venecia y Verona hay aproximadamente 121 kilómetros por lo que en una hora podremos llegar sin problema. Hay muchas ciudades entre Venecia y Verona que vale la pena visitar como Padua o Vicenza y que si dispones de algo más de tiempo, sin duda recomendamos.
Verona es sin duda un destino que no podemos obviar cuando vamos al norte de Italia y es por eso que pasar un día en la ciudad de Julieta es una parada obligada. No nos llevará mucho tiempo recorrer la ciudad, aunque sin duda te enamorará desde el primer momento que pises la ciudad.
Día 7: Vuelta a Milán
Entre Verona y Milán hay 170 kilómetros y en coche tardamos aproximadamente dos horas. Es la distancia idónea para dejar el coche en Milán y volver al aeropuerto para coger el avión a casa.
Fuente: 101 lugares increíbles, wikimedia.