De entre todos los autores que se les reconocen al autobús, encontramos un nombre más destacado que el resto. Se trata de Walter Hancock y se remonta al año 1831, quien creó el primer autobús de motor de vapor en el que cabían 10 personas. El primer trayecto de este autobús fue desde Stratford a Londres y se le bautizó con el nombre de infant (infante, niño en su traducción al español).
Era el pequeño de lo que llegaría a ser una gran industria de vehículos de trasporte masivo avanzado, sin cortar los ya existentes carros grandes tirados por caballos y los tranvías. Unos cuantos años más tarde, el 18 de marzo de 1895, se estrenaba el primer autobús con motor de gasolina en Alemania. Salió el lunes a las 6:25 de la mañana realizando la ruta entre Seigen, Nethpen y Deuz a una velocidad máxima de 15 km/h, recordemos que el límite de velocidad se encontraba en los 23 km/h.
El fabricante del vehículo fue la conocida marca Benz y fue conducido por Hermann Golze. Siendo puristas, este primer bus era un coche cubierto con conductor y un cuerpo conocido en aquel entonces con el nombre de landau, un diseño familiar para la carrocería de aquel entonces. Su motor se situaba en la parte trasera y tenía 5 caballos de potencia. En total, podía transportar a 7 personas, sin contar el conductor.
Su estreno en Inglaterra tuvo que esperar cuatro años. El 9 de octubre de 1899, comenzaba a circular el primer autobús con motor de gasolina de Gran Bretaña. Se inició en Londres por la compañía de Motor de Tracción. El prototipo Daimler fue construido en Bristol por Brazul, Holborough y Straker, y diseñado por Sidney Straker. El vehículo tenía una capacidad de 26 asientos, estaba hecho de madera y ruedas con llantas de acero.
El servicio del autobús cera entre Kensinton Gate y la estación Victoria, apenas 4 kilómetros. Desafortunadamente, no tuvo mucha acogida por los ciudadanos, que preferían ir a pie. No será hasta 1903, cuando el departamento de policía de transporte público metropolitano, el Met, apruebe el establecimiento de 61 líneas de autobuses a motor de gasolina que llegarían dos años más tardes a las carreteras londinenses.
Vía: Cínicos de sínope