Hace unos días os contábamos que habrá más radares aéreos en las carreteras españolas, gracias a la aparición del helicóptero Pegasus. Pues bien, la semana pasada se publicó que el Ayuntamiento de Madrid tiene previsto instalar un nuevo radar en los túneles de la M-30, que será capaz de controlar simultáneamente todos los carriles. Ningún coche escapará a su control.
Se trata de un radar que incorpora una moderna tecnología de sensores, pudiendo controlar hasta ocho carriles a la vez, y en ambos sentidos, toda una novedad respecto a los actuales radares que hay en las carreteras madrileñas, que solo permiten controlar un carril y se accionan cuando el vehículo para por debajo a una velocidad superior al límite permitido.
Ahora, este nuevo radar que abarca múltiples carriles puede realizar 10.000 fotografías en un solo día, y cuenta con capacidad para controlar y medir la velocidad en aproximación, alejamiento o en ambas direcciones a la vez. Estará gestionado por la Policía Nacional, que se encargará de tramitar las correspondientes sanciones.
Desde el gobierno municipal se han apresurado a avanzar que la instalación de este radar solo busca “velar por la seguridad”, si bien aún habrá que ver su señalización y funcionamiento para evaluar su efectividad y verdadero objetivo.
Según indicó el delegado madrileño de Seguridad y Emergencias, Enrique Núñez, el nuevo radar se instalará en uno de los puntos con mayor siniestralidad de la M-30. Además, se colocará la correspondiente señalización para avisar a los conductores de su presencia. Por el momento, no ha especificado el lugar concreto en el que se emplazará ya que aún no se ha decidido.
Por último, Nuñez ha afirmado que la instalación de radares en los túneles ha conseguido aumentar los niveles de seguridad en esta vía. Y es que desde 2005 (año en que se abrieron los túneles) hasta 2011, se han reducido en un 9% los accidentes con víctimas, en 11 % el número de víctimas y en 55 % el de fallecidos.
Fotografía: Madrid.es