El ser humano se siente inexorablemente deseoso de conocer los límites de su existencia. Desde el joven de 17 años que pasó 11 días (264 horas) sin dormir 1963 y 1964, hasta el holandés Wim Hof que, con 52 años, consiguió el récord de resistencia al frío al permanecer sumergido en hielo durante 1 hora y 12 minutos. Todos ellos han querido descubrir los límites de su propio cuerpo. Incluso el lector de este artículo se debe de haber sentido atraído ante la idea de conocer los límites del cuerpo en una aceleración ¿puede uno morir llegado a una determinada cifra?
Esta aparentemente inherente intriga humana es la que movió a Jason Torchinsky a reflexionar sobre cuánta aceleración podría soportar el cuerpo humano y he aquí sus conclusiones. Si bien medimos la aceleración con la letra G, estamos equiparándola a la fuerza de la gravedad. Con esto en mente, 1G es lo equivalente a la fuerza con la que la Tierra nos atrae a su centro.
Para trasladar esa fuerza al coche, se debe establecer un movimiento horizontal en lugar de vertical, a la atracción de la gravedad. En 10 segundos, estamos expuestos a 0,27G, es decir, un cuarto de la fuerza de la gravedad. Para llegar a la aceleración estándar, el coche necesitaría alcanzar los 96 km/h en 2,73 segundos.
Hasta aquí todo seguro y sin perjuicio para nadie. El Tesla Model S tiene una aceleración de 96 km/h en 2,39 segundos alcanzando la cifra de 1,14G, más que la aceleración de la gravedad. Obviamente, nadie tiene peligro de morir con esta aceleración. Un coche de carreras con motor de combustión tiene una aceleración de 0 a 160 km/h en tan solo 0,89 segundos.
La aceleración límite que puede soportar el cuerpo humano tendrá que ser, por tanto, mayor. Los números que llevan al cuerpo a perder el sentido o incluso la vida son cuando está sujeto a una aceleración de entre 4 y 6G por unos cuantos segundos y en determinadas circunstancias ya que con la indumentaria y el vehículo adecuado el ser humano ha llegado a sobrevivir a fuerzas de 100G.
Sin protección especial, el récord de supervivencia a una aceleración exacerbada está en 46,2G realizada por un oficial de las fuerzas aéreas estadounidenses, John Stapp. Consecuentemente, la aceleración a la que se puede sobrevivir en un coche rondará por los 0,061 segundos para alcanzar los 96 km/h, muy lejos de las capacidades actuales de los coches más veloces, por suerte.
Vía: Quo.