Todavía falta casi un año, pero, Porsche, tras su doblete en Le Mans en categoría GT con el 911 RSR, ya prepara su vuelta en 2014 con la categoría reina, la LMP1. Y lo hace con una mirada al pasado, fijando su mirada en el Porsche 956, un vehículo expectacular con el que la mara de Sttutgart sueña con ganar a los Audi R18, absolutos dominadores de la célebre carrera de resistencia en los últimos años.
El Porsche 956 fue uno de los prototipos más exitosos en la historia del automovilismo deportivo. Diseñado especialmente para competir en el Grupo C del Campeonato Mundial de la FIA, este coche adoptó el motor del Porsche 936 que ganara en Le Mans 1981. Se trataba de un seis cilindros bóxer de aluminio, con una cilindrada de 2.650 cc y cuatro válvulas por cilindro, que rendía de 620 a 640 CV de potencia.
Como el reglamento establecía un límite de combustible disponible para cada coche, Porsche optimizó el consumo. Con ayuda de Bosch cambiaron el sistema de inyección mecánica por uno digitalmente controlado. También se adoptó una nueva caja de cambios de cinco velocidades con sincronismos. Así se redujo el consumo elevando prestaciones y obtenían un mayor par. Con él la marca alemana ganó diez de once carreras en las que se presentó, y destaca la victoria aplastante en Le Mans 1984, donde Porsche ocupó los primeros siete puestos.
Pues bien, en el 956, uno de los mejores coches de la historia de Le Mans, se fija ahora Porsche, ya que con ese coche pasó de la nada a la victoria en cuestión de meses. Una de las mayores hazañas de la marca en competición… que quiere revivir en 2014. Y para ello, nada mejor que este motivador vídeo:
Fuente: Porsche
Vía: Autoblog