A la hora de comprar un coche, necesitas conocer las gestiones que el concesionario hará para entregarte tu nuevo vehículo con todos los papeles en regla.
En el precio final, no sólo se incluye el IVA y el coste del transporte del coche. También se añade el Impuesto de Matriculación, (para coches con más de 120 gramos de CO2 por km), que supone un porcentaje importante sobre el precio franco de fábrica (PFF), las placas de la matrícula, los gastos de la gestoría que ha llevado todo el proceso y, por último, el Impuesto de Circulación.
Estos trámites puedes hacerlos tú mismo. Es posible ahorrarse una cantidad variable de dinero, dependiendo del concesionario al que hayas comprado el coche, de la ciudad donde uno viva, etc. Pero es un proceso complejo y largo que puede resultar engorroso, de ahí que casi todo el mundo opte por dejar a los concesionarios que lo hagan por ellos.
Estos son los términos que aparecerán en la factura de tu coche nuevo:
Precio franco fábrica:
Es el precio del coche sin impuestos, el precio base en el que se basan los concesionarios para sacar el PVP. Este precio sí es igual para todos los concesionarios de España.
IVA
Es el impuesto sobre el valor añadido del tipo general, desde junio de 2010 el 18% sobre el precio base del vehículo.
Impuesto de matriculación.
Este concepto incluye la tramitación del Impuesto de Matriculación que se tabula en función de las emisiones de CO2. En la actualidad existen cuatro tramos:
– menos de 120 gramos por km no pagan impuesto.
– de 121 a 159 gramos por km pagan el 4,75%.
– de 160 a 199 gramos por km pagan el 9,75%.
– más de 200 gramos por km, pagan el 14,75%.
Transporte.
El hecho de traerte el coche desde la fábrica al concesionario tiene un precio. Es diferente en cada marca y, además, muchas veces diferente entre los modelos de una misma marca. Está entre los 150-400 €.
Equipamiento opcional
Cualquier equipamiento que hayas elegido para complementar tu vehículo y que no se ofreciera de serie irá incluido en la factura.
Impuesto de circulación
No es obligatorio que el concesionario te ofrezca tramitarte este impuesto. Algunos se encargarán ellos de conseguírtelo y otros te pedirán que vayas tú al Ayuntamiento de tu municipio para obtenerlo antes de que te entreguen el coche. La cantidad a pagar varía mucho de una ciudad a otra.
Matriculación
En este concepto se incluyen todos los gastos adicionales que tiene un concesionario vender y matricular un coche: tales como el pago en Tráfico de la licencia para el coche, las placas de la matrícula y los gastos de gestoría. En algunos concesionarios se incluye el impuesto de circulación. En las facturas no suele aparecer desglosado, sino como un único concepto.