A principios de este año, Kansas City anunció su intención de instalar más de 1.000 nuevas estaciones para recargar vehículos eléctricos. No se trata de un anuncio más, la ciudad aumentará sus estaciones un 2400 %, ya que actualmente cuenta con 40. Sorprende más si te decimos que en Estados Unidos hay solo 9.019 estaciones para recargar coches eléctricos.
De todas ellas, más de 2.000 están en California, el Estado con mayor población de la confederación y también el que tradicionalmente ha apostado más por las energías renovables. Sin embargo, existen lugares en el medio oeste norteamericano, lugares mucho más conservadores que no suelen ser noticia hasta ahora precisamente por liderar los rankings en sostenibilidad. De llevar a cabo sus planteamientos, Kansas pasaría a contar con una estación por cada 467 habitantes, frente a la estación por cada 19.000 con la que cuentan los californianos.
Además, de Texas, existen otro cuatro lugares paradigmáticos que nos sirven para entender el cambio que las ciudades del medio oeste americano están liderando. Éstas quieren cambiar su modelo de ciudad y atraer una población mucho más comprometida con el medio ambiente.
Chicago, Illinois
El Gobernador de la capital de Illinois, conocida por los norteamericanos como «the second city», va a invertir un millón de dólares en una red de estaciones para recargar coches eléctricos a lo largo de la mítica Ruta 66. Llamado «el corredor eléctrico», entre el lago Michigan y el río Mississippi, la apuesta por los coches eléctricos no tiene vuelta atrás. Se espera que en verano de 2015 estén listas las siete primeras estaciones.
Indianápolis, Indiana
Indianápolis, capital de Indiana, ha apostado por invertir en un sistema para compartir coche. El plan se llama Freedom Fleet, (La Flota de la Libertad) y costará al ayuntamiento 32 millones de dólares, pero que conseguirá ahorrar unos 75 millones de litros de gasolina en una década. Además, la ciudad contará con 1000 coches que los ciudadanos podrán alquilar por cortos periodos de 15 minutos.
Madison, Wisconsin
Madison, con poco más de 200.000 habitantes, además de ser una de las ciudades con mayor calidad de vida del país es una de las que más apuesta por reducir el consumo de combustible. Ha invertido casi 6 millones de dólares para impulsar un modelo de ciudad más sostenible. Para ello, cuenta ya con 27 estaciones de recarga públicas para vehículos eléctricos.
Saint Paul, Minnesota
St. Paul no solo se ha decantado por las renovables, sino que se ha comprometido en convertirse en la líder en vehículos eléctricos. Además, aseguran que reducirán las emisiones de CO2 en 2020. La ciudad, que no llega a los 300.000 habitantes, cuenta ya con 23 estaciones públicas de recarga y pretenden aumentar ese número. Minneapolis, la «twin city» de Saint Paul, y la que mayor población tiene del Estado, tiene 39 estaciones instaladas. Minnesota cuenta con 2.000 coches eléctricos, así que la necesidad de ir incrementando las estaciones parece más que evidente.
Vía: Grist