Hace unos días se hizo oficial un comunicado de Toyota en el que confirmaba la llamada a revisión a nada más y nada menos que 3,8 millones de vehículos. El problema es un defecto de diseño en el anclaje de las alfombrillas, que podría causar que se bloqueara el acelerador, con el correspondiente riesgo de accidente. Una cuestión que en ningún caso debería ser obviada, pero que en realidad tiene fácil solución.
Para evitar este tipo de problemas, no son pocos los fabricantes que utilizan el llamado acelerador inteligente. Su mecanismo de funcionamiento es bastante sencillo: el pedal de freno tiene prioridad/preferencia sobre el del acelerador. Vamos, que si el acelerador quedara presionado por error, con pisar el freno se pararía el coche. De esta forma si ambos pedales están presionados a la vez, la electrónica forzaría al motor a obedecer las órdenes del freno, pudiendo así decelerar sin problemas y parar el vehículo.
Desde hace unos años viene empleándose en varias marcas este acelerador electrónico inteligente. BMW los instala desde el año 2005, y otras como Audi y Volkswagen ya montan este sistema desde hace años. Estos últimos ya tuvieron casos aislados de aceleración no deseada en el pasado. Otros fabricantes como Chrysler también afirman que la mayoría de sus modelos también cuentan con el sistema. Seguramente algunos más también lo empleen, pero con estos ejemplos uno ya se hace a la idea de que es un sistema contrastado y con años de uso.
En estos momentos la que tiene un problema es Toyota, con sus 3,8 millones de vehículos llamados a revisión. Los nipones indican que la solución a esta cuestión no pasa por rediseñar la sujeción de las alfombrillas, así que probablemente adopte este tipo de aceleradores electrónicos inteligentes, con un software adecuado para solventar el contratiempo que les ha originado un defecto en el anclaje de sus alfombrillas.
Realmente el invento no tiene nada de inteligente, sino que más bien ignora el pedal del acelerador cuando se pisa el freno. Inteligente o no, la verdad es que es un recurso que todos los vehículos deberían traer instalado de serie. Su implementación no es nada compleja y nunca esta de más disponer de este tipo de medidas.
Vía | Diariomotor