Ferrari, la tan adorada compañía automovilística italiana, cumplió el pasado 10 de octubre 60 años en América del Norte y para celebrarlo, que mejor que lanzar un nuevo modelo limitado a 10 unidades, el Ferrari F60 América. Curiosamente, coinciden con el número de unidades vendidas del Ferrari 275 GTS4 NART Spyder de 1967 (la versión descapotable del 275 GTB4). Son versiones tan exclusivas que, en el caso del nuevo modelo, las unidades se vendieron antes de que los compradores pudiesen siquiera verlo.
Todas las unidades el Ferrari F60 América van a ser iguales. Una versión Spyder V12 con una carrocería de color bitono, azul y blanco con techo de tela.
Adentrándonos en los detalles mecánicos, Ferrari no han hecho oficiales las características del motor. Se sabe que es un motor de 6.3 litros de tipo V12, pero no conocemos la potencia exacta que tendrá. Tan solo confirmaron de manera oficial que la aceleración de 0 a 100km/h, será en 3,1 segundos. Si encajamos todas las piezas del puzzle, podemos deducir que será un motor similar al que monta el F12 Berlinetta, un V12 de 741 CV, que irá montado en posición frontal-central.
La carrocería, como acabamos de comentar, solo se va a fabricar en azul con zonas en blanco. Como es de esperar, la estética destaca por varios aspectos. Tiene una línea muy aerodinámica, con entradas de aire en el capó y aletas delanteras, y un difusor en el paragolpes trasero que permite una mayor atracción del chasis hacia el asfalto. Debido a la posición central del motor, han diseñado una gran entrada de aire en el paragolpes delantero, para conseguir una refrigeración óptima.
Al tratarse de una versión descapotable, incorpora detrás de los cabeceros de los asientos unos arcos de protección, para asegurar la seguridad de los ocupantes en el peor de los casos. Asimismo, como dato interesante, el techo de tela se puede montar y desmontar en marcha, siempre y cuando no se superen los 120km/h.
En definitiva, como todos los Ferrari, la estética está llena de detalles que hacen una figura atractiva y deportiva.
En cuanto al interior, la posición del conductor está rodeada de zonas rojas, el salpicadero, la consola central, el asiento, el volante y el paño de la puerta. Visualmente es muy atractivo, pero a la hora de conducir puede resultar incómodo. Pese a estos detalles, el interior es espectacular. Asientos de tipo semi-baquet que proporcionan un agarre óptimo, volante con un diámetro reducido y un conjunto de relojes enfocados al conductor que transmite una sensación de deportividad.
Las prestaciones se asemejan mucho a las del Lamborghini Aventador, aunque no se puede comparar, dado que es una versión muy exclusiva que conmemora el sexagésimo aniversario de la comercialización de Ferrari en América del Norte. Un deportivo digno de celebración.
Fuente: Ferrari