Cada vez son más frecuentes las llamadas a revisión de diferentes gamas de vehículos. Al detectar un fallo de serie, las firmas prefieren correr con los gastos del arreglo, antes que los hipotéticos accidentes puedan manchar la imagen de marca. Porsche ha sido la últma en verse obligada a llamar a revisión a un total 20.278 de sus vehículos Cayenne, de 2010 y 2011, ante eventuales prolemas.
En el taller, los técnicos de la firma solucionarán un error en el sistema de bloqueo de los faros delanteros, que de no ser susbsanado podría provocar el desprendimiento de las luces, con el consiguiente peligro de la pérdida de visivilidad en plena marcha. La firma alemana ha informado que el fallo afecta al Cayenne Basíco, a los turbo, y al SyS Hybrid, fabricados entre el 8 de marzo de 2010 y el 31 de enero de 2012. Además, Porsche ya está trabajando en 100.000 unidades que aún se encuentran en la línea de producción para subsanar el problema, antes de que los automóviles lleguen a las líneas de distribución y más tarde a los conductores.
Desde la firma, aseguran, que la reparación es bastante sencilla; basta en volver a fijar de forma correcta el bloqueo de las ópticas, una tarea con una duración de trabajo de aproximadamente 45 minutos de taller. Porsche admite haber detectado el fallo durante el desarrollo de uno de sus estudios rutinarios de calidad.
La firma espera que este contratiempo no dañe la buena imagen entre los usuarios y públio potencial. Recientemente, un informe realizado por la consultora J.D Power, situaba a Porsche como la marca del viejo continente más fiable para los usuarios estadounidenses.
Vía: Autofacil