Esto que os vamos a contar puede sonar a película de las 15:30 en Antena 3. Decimos Antena 3 porque es donde ponen las películas de sobremesa americanas y esta anécdota es digna de peli de siesta, atentos que llega la sinopsis: un Jeep Grand Cherokeese atasca en un sendero de Alaska y necesita un helicóptero Black Hawk para ser rescatado, sus ocupantes vivieron horas de tensión sorteando a la muerte y otras vicisitudes del destino. Hoy en pelis de coches.com: el rescate más caro de la historia.
Una apacible mañana del 4 de julio, los Smith (los llamaremos así para dar dramatismo) deciden celebrar el Día de la Independencia con una ruta off-road por el glaciar Knik en la región de Butte (Alaska). Todo estaba preparado para salir de ruta y volver a casa a comer emparedados y el pastel de manzana que Mamá Smith había dejado en el alféizar de la ventana enfriando antes de la celebración del 4 de julio. Vehículo preparado y ruta fijada en la app onX Off-Road de la que los Smith son grandes usuarios y que en esta ocasión habían seleccionado con una dificultad del 6/10, moderadamente difícil.
Los Smith iniciaron el camino hacia la ruta de 20,3 millas con total normalidad, sonaba Free Bird de Lynyrd Skynyr y había risas en el habitáculo. Papá Smith pensaba en esa tarta enfriándose en casa y en la Bud Light que abriría con su hijo por la noche al encender los fuegos artificiales; la primera cerveza padre e hijo de los Smith. Todo era calma cuando el SUV familiar, el viejo Jeep Cherokee ZJ se deslizó fuera del camino hacia una piscina natural creada por la fuerza de la naturaleza en uno de los últimos deshielos del glaciar.
Por un momento el tiempo se paró, ya no había solo de guitarra. El olor de la tarta se desvaneció y Papá Smith se afanaba por encontrar su teléfono una vez que comprobó que Hijo Smith estaba bien.
– «Papá, ¡llama a las asistencias, tenemos que salir de aquí como sea!»
– Lo sé hijo, no hay cobertura. ¡Estamos atrapados!
< Esta sería la conversación si realmente no hubiese cobertura, cosa que pasa sí o sí en estas películas y un senderista los habría visto y habría salido corriendo ladera abajo para encontrar ayuda >
En el pueblo más cercano a la ruta se encontraba Tom, de Elite Towing and Recovery de Wasila. Un negocio local de remolcado de vehículos que aparcan en minusválidos y de rescate en las montañas. Tom, de Elite Towing and Recovery de Wasila intentó por sus propios medios llegar al Jeep de los Smith, pero la ruta era más traicionera de lo que parecía. Su camión todoterreno no pudo con los cruces de altas aguas, la lluvia del lugar provocaba que los arroyos corriesen más rápido de lo habitual que cuando los Smith emprendieron su ruta. Tom, de Elite Towing and Recovery de Wasila, lo tenía claro. Si quería salvar a los Smith de su cautiverio natural tendría que usar un helicóptero para que padre e hijo pudiesen volver a casa a tiempo con Mamá Smith, la tarta, los emparedados, los cohetes y la Bud Light.
Tom, de Elite Towing and Recovery de Wasila, recordó que su primo por parte de madre, Tomasson de Heli Alaska conocía bien los cielos de la ruta y decidió ayudar a su primo por un favor que le debía. Tomasson sobrevoló la zona para ubicar de forma precisa al Jeep Cherokee de los Smith, tras un primer vuelo y sabiendo que la fuerza de su helicóptero era insuficiente, Tomasson de Heli Alaska y frustrado por no acometer el rescate en ese momento decidió movilizar a Jack de Northen Pioneer Helicopters.
Tomasson de Heli Alaska y Jack de Northen Pioneer Helicopters se conocieron en la guerra de Irak y ambos fueron condecorados, desde entonces el sufrimiento de la guerra trascendió en una amistad inquebrantable. Jack de Northen Pioneer Helicopters partió raudo y fugaz al encuentro de los Smith con su UH-60 Black, o como lo conocemos los mortales, un Black Hawk para recuperar el vehículo.
Gracias a las dotes de combate de Jack de Northen Pioneer Helicopters, el rescate llegó a su fin en menos de una hora, donde el Black Hawk descendió de entre los cielos para rescatar al Jeep Cherokee y a Papá e hijo Smith y llevarlos sanos y salvos a su casa.
Fin.
Esta sería la historia dramatizada de un rescate real que ocurrió el pasado 4 de julio en Alaska, un conductor decidió emprender una ruta por su cuenta en un glaciar de Alaska cuando el Jeep se precipitó en una piscina de agua glaciar. Las dificultades de la ruta impedían que una grúa al uso pudiese llegar a por ellos y tuvieron que movilizar 2 helicópteros, uno de avistamiento y sí, un segundo Black Hawk que levantase por los aires al SUV y lo llevase a una zona más accesible para ser remolcado. El precio medio que ronda el alquiler de un UH-60 Black es aproximadamente de entre 8,000 – 8,500$ la hora.
Por suerte, nadie corrió riesgos y la rapidez de la maniobra evitó fugas y filtraciones de los líquidos del coche a las piscinas naturales.
Ya sabéis, si no conocéis bien el camino, mejor ir sobre seguro.
Fuente: OnX Offroad, The Drive y Reddit.