Nos gusta cuando las marcas dan vía libre a sus diseñadores (y presupuesto) para que creen algo distinto. Y este Toyota Kikai Concept, un prototipo que la firma presentará en el Salón de Tokio es prueba de ello. Nos cuentan que la «fue diseñado para explorar y enfatizar el atractivo fundamental de las máquinas: su fina artesanía, su belleza, su simplicidad y su fascinante movimiento». Todo un homenaje, en realidad, a la creatividad, la dedicación y el conocimiento del ser humano.
Hoy en día en un automóvil se trata precisamente de lo contrario: esconder toda la maquinaria bajo una lámina metálica y que el conductor sepa lo menos posible. En el fondo es una consecuencia de la época que nos ha tocado vivir, donde las reinas son las pantallas táctiles: una interfaz que se interpone entre el organismo de la máquina y el humano.
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Y el Toyota Kikai es todo lo contrario. Pretende enseñar todo eso que suele ocultarse, para que conocer el funcionamiento interno del vehículo sea parte del propio diseño del coche. Desde las curiosas formas de su exterior (que mide 3.400 mm de longitud, 1.800 mm de ancho y 1.550 mm de alto), a detalles como el depósito de combustible, el depósito de reserva, los indicadores y mandos. Una oda a lo analógico, nada frecuente hoy en día.
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Una curiosidad del Toyota Kikai es la posición del conductor, central. La marca indica que de este modo se gana conexión con el vehículo, de manera más instintiva. Hay dos asientos más para ocupantes, en disposición triangular, «que da lugar a un agradable espacio de comunicación en el habitáculo». La ventanilla lateral, que llega hasta el techo, permite ver mejor el paisaje, ya sea urbano o en plena naturaleza.
Hay otra ventanilla más, a los pies del conductor, para ser consciente de los movimientos de los neumáticos y la suspensión y ver cómo se aumenta la velocidad por la superficie de la vía. Y por el parabrisas, se observan también los movimientos del brazo que lo acciona. Todo se ha pensado en la misma dirección: que cada movimiento del coche, cada detalle sea percibido directamente, sin interfaces digitales, sino por mecánica pura.
Fuente: Toyota
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