Logo de Noticias Coches
Purgar Frenos Coche 3
Luis Blázquez

¿Cómo se purgan los frenos del coche?

No es exactamente una práctica común, pero el líquido de frenos es perecedero y que hay que reemplazarlo cada cierto tiempo purgando los frenos. Normalmente, esto suele ser tarea del taller mecánico, dado que no muchos se aventuran a toquetear en el sistema de frenos de su coche. De todas formas siempre hay quien desea ensuciarse un poco las manos, ya sea por el regocijo individual de un trabajo bien hecho o, simplemente, por informarse.

Purgar los frenos es necesario porque, mientras que el líquido de frenos es un líquido que no se comprime, las burbujas de aire son gases que sí lo hacen y su presencia en el sistema reduce en gran medida la presión hidráulica que se puede desarrollar dentro del susodicho. Dicho en otras palabras, si el circuito de frenos tiene aire, perderás capacidades de frenado y ganarás la incómoda sensación de un pedal del freno que no se percibe tan firme como debiese.

¿Cuándo debería purgar los frenos del coche?

Muchos expertos recomiendan purgar el sistema de frenos al realizar el mantenimiento de los mismos. El propósito es eliminar el aire atrapado en las líneas de los frenos, lo que causa que el pedal pueda sentirse esponjoso. Sin embargo, bajo condiciones normales, no es necesario purgar el sistema de frenos, aunque hay algunas situaciones que requerirán hacerlo:

Cuando el nivel de líquido de frenos en el depósito insuficiente: esta es una de las razones más comunes por las que el aire ambiental puede ser aspirado dentro del sistema.

Cuando las pastillas de freno están completamente gastadas: esto hace que disminuya el nivel de líquido en el cilindro maestro. Si cae demasiado, entra aire en el sistema de frenos.

Cuando se cambian las pinzas (discos) o los pistones (tambores): esto requiere desconectar las líneas del circuito de frenos. Cuando eso sucede, el aire entrará en el sistema de frenos.

Cuando se reemplazan componentes hidráulicos asociados al sistema: si se desconecta dentro del sistema de frenos el cilindro maestro, por ejemplo, puede derivar en aire en el circuito.

Cuando hay fugas en los acoplamientos y conectores. Por las vibraciones generadas al circular sobre baches e irregularidades, las abrazaderas y las sujeciones se sueltan con el tiempo. Esto da lugar a la entrada de aire.

Para comprimir el pistón de las pinzas de freno: a veces, es necesario abrir la válvula de purga para comprimir el pistón mientras se cambian las pastillas de freno, y puede permitir que entre aire en el circuito.

Cuando los sellos de goma del cilindro de la rueda (o de la pinza de freno) están gastados: al estar expuestos a la humedad, la suciedad y los productos químicos de la carretera, pierden su elasticidad y comienzan a tener fugas. Con el paso del tiempo, los latiguillos también empiezan a agrietarse.

¿Cómo percibo que necesito purgar los frenos?

Los problemas suelen venir acompañados por algunos signos característicos. Cuando se pisa el pedal, quizá puedas sentir que su dureza ha disminuido considerablemente. A veces, incluso tienes que pisar varias veces el pedal hasta que funcionen los frenos. Cada vez que lo pisas, el pedal aumenta su rigidez, pero hay ocasiones en las que la la frenada se inicia solo cuando el pedal está presionado casi entero. Por lo general, cuando ocurre, la distancia de frenado del coche se hace mucho más larga de lo habitual.

¿Cómo puedo purgar los frenos del coche?

Primero de todo, hagamos una descripción general de cómo purgar los frenos, porque varía de ser algo relativamente fácil a algo completamente imposible. Teniendo en cuenta la dificultad, podemos discernir entre si el coche tiene ABS o no. Si es el caso, puede no ser tan sencillo de purgar, aunque si entra aire en el modulador del sistema, la cosa cambia. En algunos no habrá ningún problema para hacer la purga, tan solo bastará con quitar el fusible pertinente y volver a ponerlo al terminar el trabajo, pero otros te obligarán a pasar por el taller.

Para realizar el purgado en unos frenos con ABS se pueden ejecutar los procedimientos que se expondrán a continuación. Sin embargo, es importante destacar que cualquier reparación que realices en el hidrogrupo, el dispositivo encargado de ajustar la presión que es aplicada sobre cada uno de los neumáticos, trae consigo un purgado. Tras haber seguido correctamente todos los pasos y haber culminado en el procedimiento, cerciórate siempre que el resultado ha sido exitoso dando una vuelta a baja velocidad y frenar constantemente para evaluarlo.

¿Qué métodos hay para purgar los frenos?

Para empezar, has de colocar el coche en una superficie plana y elevarlo con un gato con las cuatro ruedas bloqueadas. Luego, ubica las válvulas de purgado, que por lo general se suelen colocar en la parte trasera de cada rueda (entre el chasis y la goma). Utiliza una llave inglesa para aflojarlas y prepárate para decidir qué método es el más adecuado para ti, por supuesto, acorde a lo que dicte el manual de usuario del vehículo.

Purgar los frenos por gravedad

¿Tienes tiempo de sobra? Entonces quizás quieras dejar que la fuerza de la gravedad haga el purgado por ti. Este método funciona para casi todos los vehículos modernos, siempre que el cilindro maestro esté en lo alto del cortafuegos, por encima del nivel de las ruedas. Pero bueno, ¿por dónde empiezas? Todo lo que tienes que hacer con este método es llenar el depósito del cilindro maestro con líquido nuevo.

Luego, afloja el tornillo de purgado en esa pinza/cilindro del freno. Espera, al menos, una hora. Cierra el grifo y cambia de rueda. Entre esquina y esquina, puedes aprovechar para hacer otras labores, porque es algo que te llevará, como poco, una mañana o tarde entera. Ya con todos los líquidos cambiados y las válvulas cerradas, bombea el pedal del freno hasta que notes que se siente sólido y sin esponjosidad.

Purgar los frenos con una botella

Casi tan simple como la fuerza de la gravedad, pero notablemente más rápida, es la “botella” de purga. Puedes hacer esta herramienta tan sencilla tú mismo con cualquier frasco o botella de refresco limpia con tapón y que tengas a mano. También necesitarás un cacho de manguera que encaje en la boquilla del acceso al purgado del freno (un tubo de aire del acuario funciona bien), o si no te merece la pena, puedes comprar una en una tienda de recambios.

Pero, para hacerlo casero, taladra un agujero en el tapón, lo suficientemente ancho como para pasar la manguera sin holguras. Taladra un segundo orificio más pequeño también en el tapón, y vierte el suficiente líquido de frenos en el recipiente para cubrir el extremo de la manguera. De esta manera no puede entrar aire. Ahora, simplemente, conecta la manguera al purgador y ábrelo. Luego, bombea el pedal del freno unas cuantas veces. Si revisas el tubo, debería estar llena de líquido sin burbujas. Cierra la válvula y repite el proceso en cada rueda.

Purgar frenos con una bomba de vacío

Si ninguna de estas dos alternativas anteriores te ha convencido, aquí tenemos la forma más rápida, y también cara: la bomba de vacío. Esta puede costarte desde unos módicos 10 euros en sus versiones manuales, hasta unos cuantiosos más de 200 euros si queremos una eléctrica de uso profesional. Esta bomba de mano se parece un poco a una pistola de agua, y en verdad tiene una construcción muy similar. Sin embargo, en lugar de lanzar agua al apretar el gatillo, aspira aire o líquidos.

Este método de purgado rápido y fácil funciona de manera muy similar a los otros dos. En lugar de forzar el aire y el líquido fuera del circuito con el pedal del freno, lo succiona a través de una bomba de vacío enganchada a lo que equivale a la botella de purga. Llena el cilindro maestro, succiona el líquido y aire viejo, y cierra la válvula. Como en todos los casos, esta operación hay que repetirla cuatro veces.

Fuente: Mapfre, WikiHow, How A Car Works

  • frenos
  • mantenimiento
¿Te ha gustado esta noticia?Suscríbete y no te pierdas las últimas novedades cada semana