El AdBlue se confunde comúnmente con un aditivo para el combustible cuando, en realidad, es un líquido que nunca debe mezclarse con diésel. El AdBlue cuenta con su propio depósito y se almacena completamente separado del combustible del vehículo. Juntar AdBlue con diésel puede causar daños por valor de miles de euros, razón de más para estar pendientes de dónde introducimos la manguera.
Para evitar algunas confusiones y ayudar a prevenir esto, el AdBlue se identifica fácilmente por una boquilla azul y su tapa de llenado en el mismo color. Sin embargo, pueden ocurrir errores humanos, y es esencial actuar con rapidez en el desafortunado caso de que hay puesto AdBlue al depósito de combustible. A pesar de llevar tiempo con nosotros, todos los años se informan de muchas averías como resultado de problemas con AdBlue, ya sea por un despiste casual o por mera ignorancia. Si ha sido tu caso, trataremos de ayudarte.
¿Qué es el AdBlue?
AdBlue es la forma más reconocida de lo que se conoce como “fluido de escape diésel” (DEF), algo que se necesita para tener un control de emisiones de reducción catalítica selectiva (SCR), de ahí que los coches que lo equipan suelan venir acompañados de las siglas DEF y SCR. Esta tecnología se ha utilizado en coches de turismo desde 2014 con la introducción de la norma de emisiones Euro 6, y se ha utilizado en vehículos pesados durante diez años más. Aún así, existe mucha gente que todavía puede sentirse confusa sobre su uso.
El AdBlue es una solución de 32,5 % de urea y 67,5 % de agua desionizada. Cuando se agrega al sistema de escape en caliente, se forma el amoníaco. Este, luego, reacciona con los óxidos de nitrógeno (NOX) presentes, convirtiéndolos en nitrógeno, oxígeno y vapor inofensivos para el medioambiente y el ser humano, dado que es liberado a la atmósfera a través de los gases de escape. A menudo, los depósitos de AdBlue se instalan junto al depósito de combustible diésel, ya sea cerca del maletero o en la parte posterior del vehículo.
¿Qué puedo hacer si he mezclado el AdBlue con el diésel?
Primero de todo, no arranques el motor. Al hacerlo, comenzará el proceso de circulación del fluido a través de todo el circuito de combustible. Puesto que el AdBlue no es compatible con ningún componente del motor, puede corroer rápidamente todas las piezas y manguitos de este. Si esto sucede, será necesario reemplazar todo el sistema de combustible. Si has sido consciente, drena el depósito de combustible.
Para eso, debes ponerte en contacto con un profesional que te elimine todo el líquido contaminado. Empleará un sistema de sifón para aspirar todo el combustible del depósito. Una vez que esté vacío, debe limpiarse con agua tibia antes de repostar de nuevo con diésel. Por último, comprueba si hay daños. Una vez que estés seguro de que no queda AdBlue en el depósito de combustible, sigue siendo esencial que un mecánico compruebe si hay algún daño causado. También pueden sustituir los filtros que habrán absorbido el AdBlue.
Lógicamente, si mezclas AdBlue con diésel por error y enciendes el motor, el combustible fluirá hacia el catalizador de escape y causará daños importantes. Por lo tanto, si crees que el AdBlue ha contaminado el diésel, no intentes seguir conduciendo. El AdBlue es menos denso que el diésel, por lo que flotará en la superficie y se alimentará a través de los inyectores. Como estos componentes usan diésel como lubricante, pueden provocar daños sustanciales y requerir el reemplazo de todo el sistema de combustible, pudiendo incluso dañar el motor.
Fuente: Testcoches