Por Ley, todos los vehículos están obligados a llevar algún tipo de sistema que les permita continuar circulando en caso de pinchazo, al menos, hasta un lugar seguro. Para ello no estaría del todo mal saber qué tipo de neumáticos son los que más duran.
Si aún así sufres un pinchazo, hay tres formas de repararlo y poder seguir tu camino. Todo depende de cuál de ellos equipe tu coche. La primera de ellas es tener una rueda de repuesto normal; la segunda es llevar un neumático Run Flat o una rueda de emergencia, que es capaz de continuar la marcha hasta un máximo de 200 km y sin pasar de 80 km/h. La tercera forma de subsanar un pinchazo es llevar un kit reparapinchazos, pero no es tan fácil como aparentemente puede suponer, ya que hay que saber utilizarlo correctamente, tener un kit adecuado.
Veamos ahora en detalle las diferencias entre todos ellos, ya que es una de los detalles a analizar en la compra de un coche, ya sea un coche nuevo o un coche de segunda mano:
Rueda de repuesto
NORMAL
Se trata de una rueda de repuesto normal, con unas medidas idénticas a las de los cuatro neumáticos que utiliza el coche. En algunas ocasiones, la medida no es exactamente igual, pero sí suele corresponder a una equivalente (por ejemplo, si tu coche lleva una llanta de 17 pulgadas con neumáticos de perfil bajo, la de repuesto puede ser de 16 pulgadas, con un perfil más alto. También suelen utilizar llantas de chapa. Su precio varía entre 50 y 75 euros de media (o más, en función de la rueda de tu coche).
- A FAVOR. Permite continuar la marcha con total normalidad. Es la mejor alternativa si sufres un pinchazo grande, un reventón, se raja una rueda… Es la solución más común.
- EN CONTRA. Ocupa más espacio, por lo que suele restar capacidad al maletero salvo que vaya colocada fuera (bajo el coche o en el portón del maletero, como en algunos 4×4). Su peso puede afectar negativamente al consumo.
DE «GALLETA»
Se trata de una rueda de repuesto de un tamaño inferior al de los otros cuatro neumáticos del coche (normalmente, tienen una anchura de 135 mm). Existe una segunda variante en la que, para ocupar menos espacio, esta rueda viene desinflada e incluye un compresor para inflarla. Su precio ronda los 50 euros de media (en el caso de que no sea de serie). Solamente debe utilizarse en caso de emergencia.
- A FAVOR. Ocupa menos espacio que la rueda de repuesto de tamaño normal (es mucho más estrecha).
- EN CONTRA. No debes superar los 80 km/h, y notarás que la estabilidad del coche empeora. En muchos casos, el hueco del maletero donde va alojada tiene espacio para una rueda de este tamaño pero no para una de medida normal como la que has pinchado, por lo que esta última no suele caber (y te obligará a llevarla en el maletero, por ejemplo).
Tipos de neumáticos
RUN FLAT
Los flancos laterales de estos neumáticos están especialmente reforzados para soportar el peso del vehículo sin deformarse. Así, en caso de pinchazo permiten circular, de media, hasta unos 200 km sin superar los 80 km/h. Según el informe de la consultoría estadounidense J.D. Power, los conductores que utilizan neumáticos run flat están menos satisfechos que aquellos que montan neumáticos normales.
- A FAVOR. El riesgo de reventón es casi inexistente. Puedes continuar el viaje aunque hayas pinchado y no obliga a llevar ningún otro sistema para reparar el pinchazo.
- EN CONTRA. Es obligatorio llevar un sensor de presión (si los neumáticos Run Flat son de serie, vienen incluidos; si no, rondan los 200 euros, y avisan a través del ordenador de a bordo), restan comodidad a la suspensión y son en torno a un 30% más caros. Además, sus pinchazos normalmente no se reparan, por lo que obligan a cambiar la rueda por una nueva. El precio sale por 154 euros de media. Es demasiado caro.
ANTIPINCHAZOS
Neumático comercializado por Continental y Pirelli que, en su cara interior, cuenta con un material que, al pinchar, tapona automáticamente la salida de aire.
- A FAVOR. Puedes prescindir del kit y de la rueda de repuesto y, a diferencia del Run Flat, no afecta negativamente a la comodidad.
- EN CONTRA. Sólo lo ofrecen estas dos marcas y para medidas de más de 16 pulgadas (valen para cualquier coche, si coincide la medida). No es efectivo si el neumático se raja. El precio es, aproximadamente, un 30% más caro que un neumático normal. Aún así, es un sistema bastante eficaz.
Kit reparapinchazos
Aquí nos encontramos con tres variantes:
MANUAL
Está formado por un líquido viscoso, las herramientas necesarias para introducir ese líquido en el interior de la rueda (un tubo y una llave para desmontar la válvula) y un compresor de aire para inflar después la rueda.
- A FAVOR. El kit es muy barato, apenas cuestan unos 10 euros. Además, ocupa poco espacio en el coche y pesa poco, con lo que los consumos no se ven afectados en absoluto.
- EN CONTRA. Es difícil de utilizar y resulta poco eficaz. Conviene ir al taller a reparar el neumático tan pronto como sea posible. Por si fuese poco, es de un sólo uso.
AUTOMÁTICO
Es igual que el kit manual pero, en este caso, el compresor está preparado para acoplar en él el bote de líquido viscoso e introducirlo automáticamente a la vez que mete aire en el interior del neumático.
- A FAVOR. Es más cómodo y eficaz que el kit manual, y ocupa lo mismo. Es el kit que llevan más coches.
- EN CONTRA. Sólo es válido con pinchazos muy pequeños (no más de 3 mm de diámetro aproximadamente). Es bastante caro, y conviene reparar el pinchazo en un taller. Sirve para pinchazos pequeños y solo se puede emplear una vez. Su precio oscila entre 60 y 120 euros
DE MECHA
Se trata de un kit reparapinchazos que emplea una tira de caucho -conocida como mecha o macarrón- que se introduce por el pinchazo con una especie de punzón, después de impregnar el agujero con una especie de cola específica (en algunos kits, la mecha ya va impregnada en esa cola). Así, la salida de aire queda taponada. Además es barato, pues lo encuentras por unos 12 euros
- A FAVOR. Es barato, ocupa muy poco espacio y es bastante eficaz, por lo que normalmente no es necesario tener que reparar el pinchazo en un taller (salvo que aprecies alguna pérdida de presión). Resulta bastante eficaz y relativamente barato. Uno con ocho mechas cuesta desde 12 euros sin compresor para inflar la rueda (con un compresor aparte cuesta a partir de 20 euros).
- EN CONTRA. Es bastante complejo, ya que requiere cierta maña y un poco de fuerza. No es válido si el neumático está rajado.
Fuente: Revista Autofácil