Según las estadísticas oficiales los videojuegos con temática de coches continúan siendo uno de los más vendidos del mercado. La industria de la automoción ha sido una fuente constante de inspiración para los desarrolladores de juegos multimedia. Desde los más primitivos hasta alguno más moderno, hacemos un repaso de los automóviles que hemos conducido con el mando de la consola.
Half Life, Episodio 2 – Dogde Charge 69: Half Life es una de las sagas más exitosos de la industria de los videojuegos. En una de sus entregas el protagonista conduce un Dogde Charger del 69, llamado Jalopy, un potente vehículo con un motor Hemi V8 de siete litros. Además del juego, el vehículo saltó a la fama gracias a su aparición en la serie Los Duques de Hazard.
Street Figher II – Lexus LS 400: ¿Quién no ha jugado alguna vez a este clásico de lucha?. El Street Fighter marcó la infancia y los inicios consoleros de muchos de nosotros. En uno de los bonus del juego el usuario tiene que destrozar antes de que el tiempo acabe un Lexus LS 400, un sedán con un motor V8 de cuatro litros y 250 caballos con transmisión automática de cuatro velocidades.
Cadillacs and Dinosaurs – Cadillac Fleetwood Brougham: En el título ya se huele a gasolina. Jack es el protagonista de esta aventura donde en una de las misiones conduce un Cadillac Fleetwood Brougham del 54, un vehículo que costaba la friolera 12.000 dólares de aquella época. Fue el gran competidor del Rolls Royce en los años 50.
Age of Empires 2 – Shelby AC Cobra: He aquí otra de las grandes sagas que todavía hoy sigue vendiendo millones de copias en todo el mundo. Uno de los mayores atractivos de Age of Empire eran los trucos que permitían al jugador recibir vehículos atemporales. Entre ellos el espectacular AC Cobra, uno de los primeros automóviles que incorporó el chasis ligero y una carrocería de aluminio. Equipado con un potente motor V8 de 7 litros y 429 caballos llegó alcanzar un valor de 2,8 millones de euros en 2006.
Another World – Ferrari GTO: En cualquier lista relacionada con los vehículos no podía faltar Il Cavallino Rimpante. En Another World, el protagonista, un extravagante científico comienza sus aventuras en un Ferrari GTO. Competidor directo del Porsche 969 presume de un motor de 400 caballos con una velocidad máxima de 305 kilómetros por hora.
Sam and Max – Chrysler DeSoto 59: De la factoría LucasArts, una pareja de policías patrulla por todo Estados Unidos haciendo cumplir la ley a bordo de un Desoto. Bautizado así por Hernando de Soto, fue uno de los vehículos más vendidos de su época. Se trata de un coupé americano que dejó de fabricarse a principios de los años 60 debido a su elevado consumo y la irrupción de la crisis financiera.
Initial D – Toyota AE86 Sprinter Trueno APEX: Videojuego poco conocido. Su mala calidad y su extraña jugabilidad ha provocado que su venta se haya restringido tan solo a territorio japonés. De la mano de Sega, cuenta la historia de un joven de 18 años que conduce un Toyota AE86 Sprinter Trueno, un clásico de tan solo 910 kilos y 120 caballos de potencia.
OutRun – Ferrari Testarrosa: Es uno de los juegos de motor más recordados. Fue un gran éxito comercial y una verdadera revolución para la industria desde que viera la luz en 1986. Así que no podía ser menos que el mítico Ferrari Testarossa con una despampanante rubia en el asiento del copiloto. Su nombre, Cabeza Rosa, es debido al color de la caja de balancines que recubre la culta de sus doce cilindros en V con 4,9 litros y una potencia de 430 caballos.
Vía: PixFans