Queda claro que una de las prioridades principales de la DGT es luchar contra los excesos de velocidad. De hecho, es lo que más están persiguiendo en la actualidad mediante un buen número de radares de todo tipo. Hace tiempo se anunció la compra de 300 radares, pero parece que la cosa no se va a quedar ahí. Se ha confirmado la adquisición de otros 150 cinemómetros a ejecutar en los próximos tres años. Ya se ha publicado la compra de los primeros 15 radares en el BOE y lo cierto es que ha levantado cierta polémica.
El importe total de esos radares asciende a 1,2 millones de euros y eso nos ha llevado a echar cuentas. Salen a un poco menos de 80.000 euros cada unidad, concretamente a un precio de 78.650 euros por cinemómetro. En la anterior compra que realizó la DGT de los citados 300 radares se desembolsaron 17,5 millones de euros. Así que parece que estos aparatos también aumentan su precio, pues los anteriores salieron a una media de 58.333 euros, alrededor de 20.000 euros por debajo.
Ese sobreprecio puede deberse a la tecnología, pues estos radares son de los portátiles que pueden usarse tanto de forma estática como dinámica, fijos en un trípode o a bordo de un vehículo de la Guardia Civil. También hay que destacar su capacidad de cubrir hasta seis carriles de circulación (en ambos sentidos) o de poder clasificar vehículos entre ligeros y pesados (distinguiendo las distintas velocidades permitidas). Con esta compra quieren seguir reduciendo las cifras de siniestralidad y servirán para reponer aquellos cinemómetros dinámicos que han «quedado inoperativos por obsolescencia o averías».
Por otro lado, de los 150 que se van a comprar en los próximos tres años se habla que 90 de ellos van a ser de tramo, que son los más efectivos según las autoridades. Por otro lado, también se ha dicho que el 80 % estarán colocados en carreteras convencionales, que son las que concentran la mayoría de accidentes. Se sumarán a los más de 400 dispositivos que tiene actualmente la DGT, pues hay alrededor de 355 radares fijos y 64 de tramo, a los que habría que sumar otros 325 radares móviles operados por los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
Fuente: El Mundo