Durante la presentación del Kia Sportage 2016 los responsables de la marca coreana en España nos hablaron de que el próximo paso en su gama sería la llegada de once vehículos híbridos de aquí a 2020 (convencionales y enchufables), que representarán el impulso de las versiones EcoDynamics. El primero de ellos ya ha sido presentado en Estados Unidos. Fue en el Salón de Chicago donde se ha podido conocer el nuevo Kia Niro, que deberíamos ver por nuestras carreteras en la segunda mitad de este mismo año.
El Kia Niro es un SUV de 4,35 metros de longitud y 1,80 de ancho que se posiciona por debajo del Sportage (4,48), por lo que su enfoque está algo más orientado a los entornos urbanos. Se basa en la nueva plataforma de la marca que emplea el Hyundai Ioniq, desarrollada específicamente para modelos híbridos, híbridos enchufables… y 100% eléctricos.
Pero mientras el Ioniq apuesta por una línea más futurista, intentando derrocar el liderato del Toyota Prius 2016, el Kia Niro tiene una imagen más clásica (en el envoltorio de moda, la carrocería SUV) con las señas de identidad de la marca como la parrilla nariz de tigre», ahora con aerodinámica activa, unas láminas que se abren o cierran para controlar la entrada de aire. Su coeficiente aerodinámico es de 0,29, una cifra muy buena para un crossover que luce deportivo y tiene detalles, como las llantas de 17 pulgadas o las protecciones off-road de la zaga.
Diseño exterior se une a un ahorro de peso clave para maximizar la eficiencia del sistema híbrido. La nueva plataforma está compuesta en un 56% por aceros de alta resistencia y partes de ella como el capó, portón del maletero y zonas del sistema de suspensión se han realizado en aluminio. La guinda la ponen los componentes fabric ados en plástico reforzado con fibra de carbono, como el pedal del freno o la estructura de los asientos. Así reduce un 5% el peso frente a un coche de similar tamaño construido de manera convencional.
Así es como el sistema híbrido, que combina un motor eléctrico de 32 kw (43,5 CV) con su motor tricilíndrico de gasolina de ciclo Atkinson de 1,6 litros de capacidad, 103 CV y un par de 147 Nm, obtenga registros de consumo y emisiones muy bajos: 89 gramos de CO2 por km y un consumo estimado de 3,8 l/100 km. Nada mal para un coche con una potencia combinada de 146 CV, y un par máximo total de 264 Nm. La transmisión corre a cargo de un cambio automático DCT de doble embrague y seis velocidades. Si funciona lo bien que cuentan desde la marca, este coche será un superventas.
Su batería de polímeros de litio de 1,56 kWh ha permitido prescindir de la batería convencional. Se ha ubicado tras los asientos traseros para evitar restar espacio interior y no perjudicar al maletero, que anuncia 425 litros de capacidad. A tenor de las fotos, la calidad del habitáculo estará al nivel de los últimos lanzamientos de la marca.
A falta de conocer los detalles de la gama europea, en Chicago el coche lució avances tecnológicos muy interesantes, como el sistema de navegación ECO-Driving Assistance System que emplea los datos del GPS para mejorar la eficiencia, aprovechando las bajadas para recargar la batería, por ejemplo. El cargador de móvil inalámbrico demuestra también que la apuesta por buenos equipamientos es total.
Fuente: Kia
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