El M5 Concept llevará a cabo su debut en el Salón del Automóvil de Shanghái, que tendrá lugar del 21 al 28 de este mes. Como suele suceder en BMW, este prototipo estará muy cerca de la versión definitiva de la quinta generación del modelo de la serie M, que llegará a los concesionarios de la marca a finales de año. Así que no se espera ninguna gran sorpresa, en lo que al diseño se refiere, en la versión definitiva del modelo de producción.
El aspecto más resaltable de esta nueva generación del M5 será su increíble motor: un V8 twin-turbo de 4,4 litros de cilindrada, con una potencia estimada de 555 CV y 680 Nm de par máximo. Aunque no han sido revelados muchos más datos al respecto, como son los relacionados con la velocidad máxima (posiblemente autolimitada a 250 km/h) y la aceleración.
Lo que sí ha dado a conocer BMW es el hecho de que, en comparación con la anterior generación del modelo, dotado de una motorización de 507 CV de potencia, el nuevo propulsor V8 mejora significativamente las prestaciones a la vez que es capaz de reducir el consumo de combustible y los niveles de emisiones anteriores en, al menos, un 25 por ciento.
El nuevo M5 hará llegar la potencia a las ruedas traseras a través de una caja de cambios de siete velocidades de doble embrague con Drivelogic, que ha sido adaptada específicamente a las características del nuevo motor V8. Al mismo tiempo también se incorpora la conocida función Auto Start-Stop de la marca, para contribuir, en lo posible, a la reducción de consumo y emisiones.
BMW también ha procedido a rediseñar todo el conjunto de suspensión y frenos, para adaptarlos a las extraordinarias capacidades del nuevo modelo. Igualmente se ha construido específicamente un diferencial trasero activo que reparte inteligentemente el par que llega a cada una de las ruedas de ese tren rodante. Por cierto, el prototipo hace gala de unas preciosas llantas forjadas, en color negro, y de 20 pulgadas de diámetro, calzadas con neumáticos 265/35 ZR20 tanto en la parte delantera como en la posterior.
En lo que al exterior del prototipo respecta, los diseñadores de BMW han optado por una apariencia más bien discreta, aunque dejando entrever su musculatura, con un frontal donde el parachoques tiene la apariencia de los modelos M de la marca, con las típicas branquias laterales en las aletas delanteras, y una trasera con un nuevo parachoques dotado de un difusor integrado que alberga los tubos de escape dobles, situados en los laterales del mismo.
Del interior no os podemos decir nada, ya que en las fotografías no ha sido mostrado, pero viendo la ausencia de rupturas importantes en el diseño exterior, tampoco esperamos grandes sorpresas al respecto, aunque nunca se sabe.
Como siempre, aquí tenéis un vídeo mostrando el esperado prototipo, y más abajo la consabida galería de imágenes.