Moverse por las calles de las principales capitales y ciudades europeas puede resultar un proceso, en muchas ocasiones, lento y frustrante debido a todo el tráfico y a la aglomeración de peatones y turistas que nos encontramos al salir a las calles. Por eso, en Londres, además de planear carriles bici por doquier, están pensado en reutilizar los viejos túneles abandonados del metro para que puedan circular libremente por sus vías, tanto ciclistas como peatones y, ya de paso, descongestionar un poco el tráfico en el centro de las ciudades.
La idea del proyecto surge de la empresa Gensler, a través de una investigación que estaban haciendo sobre el impacto en la vida de los londeninses si el metro estuviera disponible durante todos los fines de semana. Según palabras de su director general Ian Mulcahey, «a medida que fuimos explorando el impacto que esto tendría en la ciudad, descubrimos varios túneles en desuso en la red de metro y fue entonces cuando verdaderamente nos preguntamos, ¿cómo podemos darle un nuevo uso a estos espacios?'».
Entre los espacios subterráneos que están en desuso en el suburbano de Londres, no sólo hay túneles sino que también podemos encontrar intercambiadores, estaciones y viejos aparcamientos de trenes (se han identificado túneles entre Green Park y Charing Cross Road y entre Holborn y Aldwych). Además, Gensler afirma que a parte de proporcionar nuevas rutas peatonales y carriles ciclistas, estos entornos podrían albergar otros usos, como espacios para empresas emergentes, exposiciones, áreas comerciales o incluso zonas para eventos.
Por otro lado, la compañía pretende compensar el alto consumo de energía que requiere un proyecto de estas características con unos azulejos de recolección de energía conocidos como Pavegen. Se instalarían en algunos «puntos calientes» de la compleja red de túneles como, puertas de entrada, escaleras o en los propios carriles ciclistas, de manera que al pisarlos generarían energía cinética por compresión, que se transformaría en electricidad. Hasta ahora, este tipo de azulejos pueden almacenar entre 5 y 7 Julios de energía por cada paso y desde Gensler esperan que sean capaces de generar toda la electricidad necesaria.
Este proyecto ya ha ganado varios premios importantes y ha sido acogido con gran satisfacción por parte de los cuidadanos. El siguiente paso es llevar a cabo un estudio de viabilidad y ponerse de acuerdo con las autoridades locales. En Gensler están dispuestos a probar este nuevo concepto en un solo lugar como prueba. Puedes ver más información de este proyecto en el siguiente vídeo:
Para algunos este proyecto puede resultar una idea limpia, revolucionaria y que puede disminuir el número de atropellos en las ciudades y para otros un completo disparate y derroche de dinero … ¿En que bando estás tu?
Fuente: Gensler