Esta Honda NSR500V de 1997 ha roto todos los nuevos récords de subasta para una moto japonesa. Pagaron por ella 267.607 dólares, que supera todas las cifras anteriores. Había estado almacenada durante 20 años y se compró directamente e HRC.
Un dato increíble: La moto no se había arrancado nunca, solamente se había utilizado para exponerla en estático en eventos promocionales. Tras esta “ajetreada” vida promocional, esta moto de carreras V-twin, única en su tipo, fue reembalada por HRC y enviada a su propietario estadounidense, que la dejó ahí guardada… junto con un kit de repuestos completo sin usar, apto para competir en carreras de Gran Premio, hasta este desembalaje dos décadas después.
La mayoría de las motos que alcanzan precios elevados en subasta tienen un origen de competición, pero esta es una auténtica maravilla: una moto de Gran Premio intacta, con repuestos. Así la desembalaron en Iconic Motorbike Auctions:
El dominio de Honda en el mercado de motocicletas y en competición no se ha traducido en revuelo entre los coleccionistas. Los japoneses han sido el mayor fabricante de motocicletas del mundo desde 1959, prácticamente durante la última mitad de la historia del motociclismo. Honda está tan por delante que el segundo ni siquiera cuenta, con unas ventas acumuladas que pronto superarán los 500 millones de unidades.
A lo largo de su reinado, Honda ha realizado proezas tecnológicas magistrales para lograr sus objetivos. La lista sería demasiado larga para enumerar, pero esta moto captura el espíritu de las motos de carreras de dos tiempos como pocas.
Honda ya ganaba la mayoría de carreras de la categoría reina de motociclismo con el motor V4, así que apostó por una solución sencilla y funcional: La NSR500v es una moto de dos tiempos bicilíndrica en V de 500 cc relativamente sencilla, que buscaba ser ligera y una buena reserva de potencia. Con 50 CV, apenas pesaba 30 kg, como una de 250 cc. En su segundo Gran Premio en 1996 Tady Okada lograba la pole position en su primera carrera.
No era la más rápida en línea recta, pero lo compensaba con un excelente manejo, un paso por curva soberbio y una capacidad de frenado superior al resto, habida cuenta de su poco peso. Además, la entrega de potencia y par la hacía fácil de conducir rápido, ideal para que los jóvenes pilotos fuesen fogueándose y mostrando sus capacidades.
Honda Racing Corporation fabricó solo 20 unidades NSR500v. Dos más se fabricaron con una configuración ligeramente diferente en la última temporada, antes de que cambiaran las reglas de MotoGP y pusiese fin la era de los dos tiempos. La gran diferencia fue que, a diferencia de las NSR500 V4 que se alquilaron a equipos internacionales seleccionados, las V2 se vendieron directamente.
Ninguna había alcanzado precios tan elevados como esta. La más cara hasta ahora había alcanzado 127.838 dólares. Eso sí, no es la moto de dos tiempos más cara de la historia, pero ese récord corresponde más a una obra de arte que como motocicleta, ya que tenía el aura del rey Midas de los vehículos, Steve McQueen, la Scott Flying Squirrel restaurada por Von Dutch.
Fuente: Iconic Motorbike Auctions