Lo reconozco. Cada día que pasa soy más aficionado a los híbridos. He probado ya unos cuantos (en coches.com puedes ver la prueba que hice al Honda CR-Z). Esa combinación de dos motores, de combustión y eléctrico, consiguen que disfrutes de la conducción y de prácticamente toda la potencia desde muy bajas revoluciones y con un consumo de combustible contenido.
Pero aceptémoslo. A día de hoy, en un viaje largo, un diésel resulta imbatible. Por eso, en un viaje a Cantabria que debía hacer, elegí uno de los diésel que menos consumen del mercado: El León Ecomotive. Llevaba unos años sin montar en el popular compacto de SEAT y lo reconozco: Ha mejorado una barbaridad. Ya no es aquel coche al que su primo Golf le miraba por encima del hombro.
Parecía que el SEAT León no podía ocupar un lugar más privilegiado a la hora de elegir un compacto, quizás porque (es mi opinión), fue uno de los modelos del mercado al que el tuning salvaje hizo más daño. Pero esos tiempos ya han pasado. Ahora es un coche a tomar muy en cuenta capaz de soportar la comparación con cualquiera de sus rivales «ricos». Y además, con esta versión Ecomotive, consumiendo poco. Muy poco.
Equipamiento
El SEAT Leon Ecomotive se ofrece en equipamientos Reference y Style. La unidad que probamos nosotros era con acabado Style. Lleva antibloqueo de frenos ABS, control de tracción TCS, de estabilidad ESP y distribución electrónica de frenada EBA,. También 6 airbag, indicador de marcha recomendada (para optimizar consumos), desconexión del airbag acompañante (para, por ejemplo, montar en la butaca del acompañante una sillita infantil), anclajes Isofix en los asientos laterales traseros, testigo de pérdida de presión de neumáticos, asistente de ayuda al arranque en pendientes, antena en techo antirrobo, cinturones de seguridad ajustables en altura con avisador acústico de no abrochado y retrovisores calefactados.
¿Te parece mucho? Pues eso es sólo parte del acabado básico. Añade a eso faros dobles, vidrios tintados, manetas de puertas, paragolpes y espejos retrovisores en el color de la carrocería, cajón bajo los asientos delanteros, volante ajustable en altura y extensión, luz en maletero, guantera iluminada, elevalunas eléctricos delanteros que bajan y suben de un solo toque, cierre centralizado con mando a distancia, haz de luz regulable desde el interior y ordenador de a bordo.
¿A que parece mentira que hablemos de un SEAT? Pues aún hay más, porque aún hablábamos del acabado reference. El más completo Style añade a lo anterior faros antiniebla con luz estática de giro Cornering, volante multifunción de 3 radios con aro forrado en cuero (como el pomo del cambio), elevalunas eléctricos traseros, control de velocidad de crucero, espejos retrovisores exteriores eléctricos calefactados con posición parking, función de las luces Coming Home (que se mantienen encedidas unos instantes una vez apagamos el motor para alumbrar el perímetro del vehículo en espacios oscuros), manetas interiores de las puertas cromadas, climatizador de doble ambiente, radio-CD/MP3 con mandos duplicados sobre el volante, 6 altavoces y puerto Aux-in, conexión combinada USB-Aux in, asiento de conductor y acompañante con regulación lumbar y de altura, y llantas de aleación de 16 pulgadas modelo Enea combinadas con unas cubiertas 205/55.
Exterior
No, el León Ecomotive no es como el resto de la gama. SEAT ha mejorado la resistencia aerodinámica del esta versión (que pasa de 0,33 Cx a 0,30 Cx). Para ello, ha modificado la parrilla (que ahora va cerrada) y ha colocado deflectores en las ruedas. Los neumáticos son de baja resistencia a la rodadura y van inflados a una presión mayor. También se deja por el camino 20 kilos y ahora el peso total se queda en 1.250. ¿Por qué este tipo de mejoras no se aplican en todos los coches? No deben de resultar demasiado caras de aplicar y seguro que los conductores lo agradeceríamos enormemente (sobre todo nuestros bolsillos).
Interior
El León, sigue la norma de SEAT «Autoemoción». Se ha pensado para que su conductor disfrute de la conducción y del placer de conducir. Pero eso no significa que, a pear de su línea exterior deportiva, renuncie a la comodidad y a la practicidad por dentro.
La posición al volante permite un ajuste muy preciso para cualquier gusto. El cuadro de instrumentos tiene el cuentarrevoluciones va en el centro, y no le falta ninguna información básica: velocidad, temperatura de agua y nivel de combustible, además de una pantalla multifunción para visualizar las funciones del ordenador de viaje. Aunque el diseño del salpicadero es como el Toledo y el Altea, el material tiene mucho mejor aspecto. Adiós al plástico duro y se pasa a uno más agradable y con mayor sensación de calidad.
¿Habitabilidad? Viajan cuatro personas sin agobios de ningún tipo. Y aunque es de los coches más estrechos de su segmento, en los ratos que viajamos cinco personas en él, el que viajaba en el medio no lo sufría demasiado. Sólo el acceso a esas plazas sí que podría mejorar un poco. Además, el ruido del motor common rail no llega apenas dentro, la insonorización es muy buena… o el motor muy silencioso… O ambos. El caso es que, habiendo conocido en anterior 1.9 TDi, este me parece mucho menos ruidoso, lo que se agradece a la hora de viajar.
La visibilidad es buena, excepto cuando miras hacia atrás para aparcar. La luneta trasera es más bien pequeña y se ve poco a través de ella. Claro que, no se puede pedir un diseño deportivo y cristales gigantes…
Motor
Respecto al anterior León ECOMOTIVE, lleva el nuevo motor diésel (1.6 TDI de 105 CV) y varias tecnologías para reducir el consumo (dispositivo automático de parada y arranque del motor, y sistema de recuperación de energía, para cargar parcialmente la batería -haciendo las veces de alternador, lo que permite desconectarlo en determinadas circunstancias para ahorrar- en las fases de retención y frenada), además de las mejoras aerodinámicas de las que os hablábamos antes. Además, la caja de cambios tiene unos desarrollos finales alargados.
Gracias a estos cambios, el consumo se reduce en 0,7 l (consume 3,8 l/100 km, que equivalen a 99 g/km de CO2), respecto al motor 1.9 TDI que sustituyó. ¿Prestaciones? Alcanza 188 km/h de velocidad máxima (2 km/h más, gracias a las mejoras aerodinámicas) y acelera de 0 a 100 km/h en 11,7 s (0,8 s más lento). Con su depósito de 55 litros anuncia nada menos que 1.400 kilómetros de autonomía. ¿Será eso cierto?
Comportamiento
Quien se interese por este coche lo hará, sobre todo intereándose por esos reducidísimos consumos que anuncia la marca. Para comprobar si esto es así, realizamos un viaje de Madrid a Cantabria. 459 kilómetros. Unos 900 ida y vuelta (al final en ese fin de semana hice casi 1.200 km, ya que nos movimos bastante una vez allí). Pero antes de nada, voy a mencionar algunas cosas que, sin duda, influyeron mucho en el consumo del coche. Atascazo a la salida de Madrid. Un accidente en la A-1 que hizo que probásemos a fondo el sistema Start & Stop de arranque y parada automática del motor. Funciona bien. Detiene el motor cuando frenas y quitas la marcha y arranca de nuevo en un santiamén, en cuanto pisas de nuevo el embrague. Mientras el motor está parado, el equipo de radio o navegación y la ventilación del interior funcionan normalmente.
Y aunque el Start & Stop puede desactivarse, no lo hice. Según las cifras oficiales, en estas condiciones urbanas el consumo sube a los 4,6 litros, aunque el ordenador indicaba algo más de cinco litros (nada raro, por otra parte).
Otro factor que sin duda hizo subir el consumo fue que llovió durante todo el camino. Muchísimo. A mares. Tenía miedo de que esto afectase a los neumáticos de baja resistencia a la rodadura, que no evacuasen el agua lo suficientemente rápido. Para nada. Se comportaron de forma fantástica.
Más factores que condicionaron los registros alcanzados: El recorrido incluía tres puertos de montaña (en los que no pensé en absoluto en los consumos). Además el viaje se realizaba con el coche cargado y cuatro ocupantes. Si añadimos a eso que la velocidad superó en bastantes ocasiones los 120 km/h, eso nos dió un consumo medio de 5,5 litros a los 100. Aceptable. Con un depósito recorrimos prácticamente 1.000 km. No son las cifras oficiales, pero esos condicionantes que he ido recopilando penalizaron la cifra final que, como digo, me pareció realmente buena.
Ya he hablado antes de las prestaciones. No es un Cupra, pero para un uso normal, no eché de menos potencia en el Ecomotive en ningún momento. Ni subiendo puertos, ni porque fuese cargado… No me dediqué a hacer tramos de carreteras sinuosas a tope, pero en general, las suspensiones y el aplomo del coche, muy bien. Equilibrio entre seguridad y comodidad. No es un cohe de carreras, recuerda, pero su comportamiento sí que es dinámico.
Maletero
El maletero tiene 341 litros de capacidad y el acceso al mismo desde el portón peca de un plano de carga bastante elevado, una concesión al diseño para potenciar la robustez de la parte trasera. Eso sí, no tiene rueda de emergencia, sólo un kit antipinchazos.
Veredicto de coches.com
Una gran opción de compra. Compite en un segmento con modelos similares como el Ford Focus ECOnetic o el Volkswagen Golf Bluemotion. Otros compactos ahorradores más exclusivos serían el Audi A3 1.6 TDIe (con cinco puertas, el A3 Sportback 1.6 TDIe) y el Volvo C30 DrivE. El Seat León presenta batalla a cualquiera de ellos por consumo, habitabilidad, diseño… y precio.
Precios León Ecomotive:
1.6 TDI CR 105 CV Ecomotive Reference: 20.050 euros
1.6 TDI CR 105 CV Ecomotive Style: 21.600 euros.
En esta página puedes ver la fícha técnica completa del SEAT León Ecomotive y aquí encontrar los mejores precios en concesionarios oficiales del Seat León, con más de 3.000 euros de rebaja).
- Línea deportiva
- Consumos contenidos
- Comportamiento dinámico
- Acceso al maletero
- Sin rueda de emergencia
- Visibilidad trasera
Galería de fotos: