Algunos acuden a departamentos especiales para personalizar sus coches de una forma única. Otros ahorran para comprarse aquel que tanto desean. Sin embargo, hay algunas personas que, simplemente, se deciden a construir su propio vehículo. Esto es exactamente lo que ha hecho youtuber e inventor Colin Furze: fabricar una réplica funcional del icónico Landspeeder de Star Wars: Episodio IV – Una nueva esperanza (1977).
Cualquiera que haya crecido viendo la trilogía original de La Guerra de las Galaxias recordará que los primeros 30 minutos ya nos habían expuesto a una gran variedad de vehículos y naves espaciales que habitan en la universo de Star Wars. Los Destructores Estelares y el Hacón Milenario son icónicos, pero el primer vehículo terrestre que aparece en la película es el desvencijado aerodeslizador que Luke Skywalker (Mark Hamill) conduce en el planeta desértico de Tatooine.
El Landspeeder, hecho completamente con materiales de Ebay durante más de cinco semanas, se ha diseñado alrededor de un carrito de golf. Normalmente, estos vehículos funcionan con un pequeño motor eléctrico, pero eso no es lo suficientemente bueno para una máquina de este calibre. Para aportar algo más de empuje y asemejar más la réplica al concepto original, Furze instaló dos motores a reacción a cada lado, aunque llegará un motor eléctrico de mayor potencia en su sustitución en virtud del ruido y el consumo de combustible.
Se cree que es el único modelo de Landspeeder de metal a gran escala que existe y puede viajar a 25 mph (40 km/h) usando la potencia del propulsor eléctrico actual (13 kW), y unos más destacados 40 mph (64 km/h) con los motores a reacción estén funcionando a pleno pulmón. Montar en él seguramente parece más divertido que las ratas Womp o la leche de color azul. El habitáculo se ha gestado con madera contrachapada, manteniendo las escalas, con el volante y la columna de dirección ensamblados a posteriori.
La idea inicial era usar fibra de vidrio para la carrocería, pero debido a limitaciones de tiempo y peso, acabo siendo de láminas de metal. Y aunque la premisa de un aerodeslizador es que se mueva por el suelo sin el contacto de las ruedas, un conjunto de espejos en la parte inferior de la carrocería lo hacen parecer flotar. Y tampoco es demasiado grande, ya que apenas mide 3,7 metros de largo. No está mal para un trabajo casero hecho en un garaje de Lincolnshire, en Reino Unido.
Esta no es la primera vez que Colin ha construido una réplica de algún artilugio de Star Wars. Previamente ha fabricado un AT-AT de 5,5 metros de altura y un caza TIE de tamaño real (e incluso una moto voladora), todo ello documentado en su sitio web y canal de YouTube. Bajo estas líneas se puede ver el proceso de fabricación del Landspeeder de Luke Skywalker a tamaño real y completamente funcional. Más abajo, se puede ver el meritorio resultado final.
Fuente: Colin Furze
Vía: YouTube
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