Lazareth es una empresa francesa que gusta de hacer vehículos sorprendentes. El último de ellos es una transformación del Austin MINI Moke, la versión más lúdica y playera del Mini clásico, del que se fabricaron 50.500 unidades entre 1964 y 1993. La versión de Lazareth va mucho más allá de la arena de la playa, se trata de un Mini Moke anfibio.
El clásico Mini Moke, en el que se solía mover Brigitte Bardot por Saint Tropez allá por las décadas del 60 y 70 de siglo pasado (cuando aparcaba su Rolls-Royce), pega un cambio brutal tras pasar por las manos de Ludovic Lazareth. Desde que creó su empresa en Annecy-le-Vieux, cerca de la frontera suiza (antes habia trabajado en Aixam Mega, los de los vehículos sin carné, ha realizado personalizaciones de motos y quads, pero el Mini Moke anfibio los supera a todos.
Y es que no se trata de una actualización del Moke, sino de toda una transformación en toda regla. Fabricado con un chasis y carrocería autoportante de aluminio, se ayuda de la espuma de célula cerrada para que pueda flotar. Mide 2,30 metros de longitud (por 1,5 de ancho) y para mover sus 440 kg de peso emplea un motor de 400 cc, que se ubica en un espacio estanco. Sus 19,2 CV de potencia que enía a las cuatro ruedas mediante su tracción total sirven para que alcance hasta 90 km/h en tierra.
Otro cantar es navegar. Para ello solamente hay que girar un mando en el salpicadero y entonces una hélice que le permite avanza a una velocidad de siete nudos (unos 12 km/h). El volante permite que navegue a babor o estribor e invirtiendo el giro de la hélice no hay problema para ir hacia atrás.
Sabemos que estás deseando ver en acción al Mini Moke anfibio. Su desarrollo ha costado un par de años y ya está en venta por 42.000 euros. Un precio elevado, pero se ha homologado como bote auxiliar de una embarcación, por lo que no descartes ver cómo se baja alguien de un yate… en uno de estos… y se va a comer al interior directamente. Disfruta del vídeo:
Fuente: Lazareth
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