El Toyota Camatte 57s formaba parte de un proyecto que la marca japonesa presentó en 2013 y que iba más allá del mundo el motor. La idea era adentrar a los pequeños de la casa en el mundo de la automoción, con un modelo que podían montar y desmontar junto a sus padres, como si de un mueble de Ikea o un Lego se tratase. Su nombre viene de que el coche. de apenas tres metros de longitud, lo conforman 57 paneles, muy manejables.
El objetivo del proyecto Camatte es doble. Por un lado, que los niños más interesados en las cualidades del coche pudiesen aprender cómo se construye un coche y las funciones de sus partes de trabajo, gracias a este en un modelo que aparece en Tech Lab de Toyota. Por otro, ayudar a inspirar a los conductores (e ingenieros) del futuro, mostrando cómo diseñar un coche y la ingeniería que hay detrás puede ser gratificante y divertida.
Ahora, durante el Salón del Juguete de Tokio que se celebra del 12 al 15 de junio, Toyota ha dado una vuelta de tuerca a esta original idea, presentando la segunda evolución de este prototipo, el Toyota Camatte Sport LED Concept, que cuenta con una característica muy especial, un capó cubierto de LEDs que permite personalizar el diseño en cuestión de segundos.
Ahora los niños no solamente podrán configurar el coche completamente a gusto (hasta los volantes y pedales son regulables para que se adapten a personas de su estatura), sino que además podrán ver los dibujos en el capó con 7.000 LED que cuenta y decorar el coche a su gusto.
El sistema funciona gracias a una cámara que escanea la imagen que se quiere y luego la muestra en el capó. Te dejamos con un vídeo en el que puedes ver una demostración práctica de todo el proceso:
Fuente: Toyota