Aunque no es recomendable detenerse en medio de la carretera, hay ocasiones en las que por una avería o una emergencia es necesario hacerlo. Pero no hay que olvidar que hacerlo conlleva una serie de riesgos que pueden no ser reversibles. De hecho, son muchos los que fallecen cometiendo esta práctica sin las medidas de precaución adecuadas, y no queremos que ese número continúe aumentando.
De acuerdo con la Dirección General de Tráfico (DGT), ante una avería, un accidente o un imprevisto de cualquier tipo, “en caso de tener que detener tu vehículo, hazlo siempre con la máxima precaución. Retira el vehículo de la calzada, pon las luces de emergencia, señaliza y hazte ver”. Para ello, el organismo que vela por nuestra salud en las carreteras ha descrito una serie de pasos y reglas básicas que pueden ayudar a evitar otros accidentes, por lo que es imperante que tengas una idea de ello en mente de cara a futuras ocasiones.
Lo primero que pide la Guardia Civil es mantener la calma, controlar los nervios y actuar con bonanza para evitar tomar decisiones precipitadas. Una vez estés convencido de que estás tranquilo y tienes la cabeza fría, es el momento de actuar rápidamente pero sin poner en riesgo nuestra seguridad ni la del resto de los conductores de la vía. Lo segundo y casi más importante es señalizar nuestra avería con las luces de emergencia (warning) para avisar a todo el que venga por tu camino y mantenerlas encendidas antes de detenerte.
De momento, eso hará que el resto de los conductores extremen las precauciones. El tercer punto fundamental es el de encontrar un lugar adecuado y seguro para detener el vehículo. Para ello, la DGT recomienda detenerlo fuera de la calzada y de la vía, pero si te encuentras en una autopista o autovía, intenta salir por la primera salida si es posible, o en su defecto en el arcén. Antes de bajarte del coche, ponte el chaleco reflectante, puesto que además de ser obligatorio por ley, ayuda a que el resto de conductores te vean desde lejos.
Cabe decir que el chaleco un elemento que deberás tener a mano y en un lugar accesible del coche, donde puedas ponértelo sin necesidad de bajarte. Con los pasos previos cubiertos, es el momento de señalizar la presencia de nuestro coche con ayuda de los triángulos de emergencia, los cuáles se deben ubicar a 50 metros detrás del coche y también por delante en caso de que la vía sea de doble sentido. Pero antes de bajarte, no te olvides de revisar lo que sucede a tu alrededor y comprobar si puedes salir del vehículo sin peligro.
Asimismo, las luces de emergencia V-16 también son una alternativa notablemente más segura con respecto a los triángulos, y cuyo uso será obligatorio a partir del 1 de enero del 2026. Por último, hay que resguardarse en un sitio seguro. Si no es posible bajarse con total seguridad del coche, nos quedaremos en su interior con los cinturones abrochados. Pero si salir de él con seguridad es posible, lo recomendable es todo el que lo haga tenga el chaleco puesto y espere lejos de la calzada, detrás del guardarraíl o en un lugar protegido del tráfico.
Fuente: DGT