Aparcar ha sido o es uno de los puntos más delicados para cualquier conductor. A algunos se les da realmente bien y a otros desastrosamente mal, pero en ningún caso es indicativo de tus cualidades como conductor en la carretera, sino como aparcacoches. Hasta los mejores conductores y pilotos pueden ser realmente caóticos aparcando, mientras que peligros constantes en la carretera pueden aparcar en cualquier hueco, por pequeño que sea, sin problemas.
A pesar de que hay genios que se dedican a aparcamientos de Récord Guinness, poca gente es tan ducha como para apracar en un espacio tan pequeño, y además derrapando. Otra manera de aparcar es con los novedosos sistemas que te aparcan el coche solo, aunque Ford ya ha encontrado un problema en ellos, y es que muchos de los conductores no saben sacar el coche del hueco en el que se aparcó automáticamente.
¿Cuál es entonces la solución? Este es el truco definitivo para aparcar, en cuatro pasos:
Antes de nada, comprueba que tu coche cabe en el hueco que hay y no seas bruto, porque no hay truco posible que haga a tu coche ser más pequeño.
PASO 1: Alinea tus ruedas traseras con el final del parachoques del coche que tienes delante del espacio en el que vas a aparcar. Gira totalmente el volante en la dirección en la que esta el espacio de aparcamiento o la acera.
PASO 2: Una vez que el centro de tu rueda trasera interna se alinee con el lateral del coche delantero que da hacia la carretera, pon el volante recto y avanza marcha atrás sin girarlo.
PASO 3: Cuando el centro de la rueda trasera del exterior llegue a alinearse con el mismo lateral del coche delantero del que hablamos en el paso anterior, gira el volante totalmente hacia el lado en el que queda la carretera.
PASO 4: Deberías tener el coche perfectamente aparcado. Así que simplemente sal de él inflando el pecho y presumiendo de lo bien que lo has hecho.
Está claro que la experiencia ayuda en esto, pero este truco se basa en la geometría y está comprobado. Algunas variantes como el radio de giro de cada coche influyen en parte, pero debería servirte la mayoría de las veces. También puede ser un buen recurso para aquellos que pensáis sacaros el carné de conducir pronto y tenéis que hacer frente a ese momento tan temido, aunque si empezáis bien, evitaréis un examen desastroso.
Fuente: Road&Track