En 2002, 15 niñas murieron en Arabia Saudí, en la Meca, en un incendio. La denominada policía de la moral, encargada de velar por la ley islámica, impidió que pudieran escapar por no llevar puesto el preceptivo velo y la túnica que debía cubrir sus cuerpos. Las dejaron morir. Probablemente desconocíais esta noticia porque no trascendió; las relaciones que mantiene España con Arabia Saudí deben seguir siendo amistosas, y los intereses empresariales están por encima de todo.
Este es sólo uno de los muchos ejemplos en los que la primera potencia petrolera del mundo liquida los derechos humanos impunemente. Por eso, si eres una mujer, no te aconsejamos que elijas éste país como destino. Hay muchas cosas que no puedes hacer, entre ellas conducir. Pero un príncipe de la familia real saudí ha publicado un manifiesto bastante conservador y limitado que defiende el derecho de las mujeres a conducir en aras de la economía del país.
Lo que las mujeres no pueden hacer
En Arabia Saudí convive el lujo más decadente, la desigualdad y el conservadurismo más estricto bajo una monarquía absoluta, la del rey Salmán bin Abdulaziz. Aquí las mujeres no pueden desplazarse sin un pariente masculino, ya que deben contar con un guardián para que no caigan en el pecado. Por ende, no pueden viajar sin autorización se su marido o tutor legal, relacionarse con hombres y abrir una cuenta bancaria sin permiso de su marido.
Por descontado, su vestimenta debe ir acorde con el estricto código de la shariah que impera en la península: túnica negra que cubra todo el cuerpo, dejando a la vista el rostro en el mejor de los casos. En este país todas las partes de la mujer son consideradas pudorosas menos las manos y los ojos. La policía religiosa saudí controla estrictamente el cumplimiento de esta norma, como pudieron comprobar los familiares de las 15 niñas que murieron en el incendio de 2002.
Los clérigos consideran que las mujeres que conducen socavan los valores sociales
Tampoco pueden practicar deportes al aire libre, leer una revista femenina que no haya pasado previamente por el filtro censor o entrar en un cementerio. Lo más alarmante de todo es que tampoco pueden ser operadas de urgencia sin una firma cotejada, ni aceptar una trabajo, ni estudiar.
Por supuesto, tienen prohibido conducir ya que los permisos no les son concedidos, y los intentos de muchas de ellas por ponerse al volante han acabado en cárcel, multas y latigazos. . Los hombres también reciben multas si permiten a sus mujeres coger el coche ¿La razón? En caso de avería, pueden llegar a relacionarse con otros hombres. Y lo que ya no podemos poner en la lista de cosas que no pueden hacer es votar y presentarse, pero sólo en las elecciones municipales y desde 2015.
Un mensaje con trampa
Después de unas píldoras informativas de cómo andan los derechos de las mujeres en Arabia Saudí (a rastras), volvamos al eje central de nuestra información. Un príncipe, miembro de la familia real saudí, con mucha influencia en las redes sociales, publicó el pasado 29 de noviembre un tweet bastante incendiario que tuvo multitud de impresiones.
Según Al Jazeera, un devoto de los derechos de la mujer. En el mensaje reclamaba el fin del debate y llamaba al derecho de las mujeres a conducir en el único país del mundo en el que no pueden hacerlo. Pero el mensaje tiene trampa.
كفى نقاش:
حان وقت قيادة المرأة للسيارةhttps://t.co/BBgyF8i1Gs
Stop the debate:
Time for women to drivehttps://t.co/6KAniFa4BT
— الوليد بن طلال (@Alwaleed_Talal) November 29, 2016
En la carta abierta que publica alude a un cambio de mentalidad en cuanto a lo que pueden y no pueden hacer las mujeres saudíes, y aporta argumentos económicos, sociales y religiosos que sustentan su teoría. Lo que más preocupa al príncipe es que estas mujeres a las que no se les permite conducir recurran a chóferes extranjeros o cojan taxis que hagan perder dinero innecesariamente a sus familias. Asimismo, si pueden conducir «sus maridos no tendrán que perder tiempo de trabajo en llevarlas a ellas y a los niños al médico y otros destinos».
La piel de lobo se descubre al final de la carta, a lo largo del apartado «Condiciones y restricciones». No deben conducir fuera de las ciudades o llevar vehículos de mayor tamaño que un coche. Parecía que pintaba bien la reivindicación, pero no.
Las mujeres saudíes continúan luchando sin descanso por sus derechos a través de las redes sociales y de plataformas como Amnistía Internacional o Human Rights Watch. En marzo de este año un avión pilotado por mujeres aterrizó por primera vez en Arabia Saudí, por lo que la democracia avanza con cuentagotas
Desgraciadamente nos quedaremos sin saber qué modelo llevará la Reina Leticia para su próxima visita a Oriente Medio, programada para 2017, ya que sólo asistirán varones. Una pena. Las Relaciones Internacionales funcionan así, dejando en una esfera aparte a la mitad de la humanidad.