El segmento de los SUV de lujo está en pleno auge. Han llegado para quedarse algunas firmas que solamente se dedicaban a deportivos, como es el caso de Lamborghini con el Urus, Aston Martin con el DBX y Ferrari próximamente con el Purosangue. Aunque si hay uno que se adelantó a la tendencia, ese fue el Bentley Bentayga. Destacado por sus múltiples versiones que han ido saliendo a la venta en el último lustro, ahora le toca el turno al Bentley Bentayga EWB 2023, la variante de batalla extendida.
Como su propio nombre indica, este «Extended Wheelbase» incrementa su distancia entre ejes 180 mm para pasar de 2.995 a 3.175 mm y llegar hasta una longitud total de 5.322 mm. Eso se traduce en una mejora sustancial del espacio interior, repercutiendo directamente en las plazas traseras. Son las grandes beneficiadas y se ofrecerán con hasta tres configuraciones de asientos, ofreciendo entre cuatro y cinco plazas, incluyendo una inédita que no habíamos visto hasta el momento.
La configuración de asientos 4+1 cuenta con dos butacas traseras que ofrecen una comodidad sobresaliente gracias a los ajustes eléctricos, calefacción, ventilación y cinco programas de masaje individuales. Pero, además, se incluye un quinto asientos central para uso ocasional que lo hace más práctico. De serie vendría con cuatro asientos (2+2), mientras que se podría optar por los cinco asientos tradicionales si el cliente lo solicita. Curiosamente, no se pueden montar siete plazas en el Bentayga EWB.
El motivo principal es que se ha trabajado en el máximo confort a bordo. De ahí que aparezcan la Bentley Airline Seat Specification, que permite reclinar los asientos hasta 40 º a través de la pantalla táctil. Habría un modo Relax para estar casi tumbado y un modo Business para tenerlo en la posición más vertical. No falta una climatización avanzada que analiza la temperatura de contacto y la humedad de la superficie del asiento, hasta 177 ajustes en seis zonas de presión para los masajes y otras facilidades.
El Bentley Bentayga EWB también va a destacar por la enorme calidad y cuidado con el que se ha hecho su habitáculo. Los materiales son totalmente configurables al gusto del cliente, de hecho, es el modelo de la marca que acepta mayor personalización. Afirman que podría haber más de 24.000 millones de combinaciones de equipamiento en este ejemplar. Destaca un nuevo patrón para la tapicería de cuero, los paneles Metal Overlay in Veneer de sólo de 0,07 mm de grosor o la iluminación ambiental LED totalmente configurable.
En el diseño exterior apenas hay diferencias, un nuevo entramado para la parrilla, llantas de 22 pulgadas pulidas y, por supuesto, ese perfil alargado. La gama mecánica mantiene el V8 biturbo de 4.0 litros con 550 CV para hacer el 0 a 100 km/h en 4,6 segundos y conseguir una velocidad máxima de 290 km/h. Más interesante es que mantenga la dirección electrónica en todas las ruedas y el Bentley Dynamic Ride de serie. Eso reduce el radio de giro un 7 % respecto al Bentayga convencional y lo deja en 11,8 metros.
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