Cada vez que el diseño de un nuevo modelo de BMW o de un componente recibe críticas, la compañía tiene la costumbre de apegarse a su decisión. Pero, ya se trate de un estilo polémico o de complejos sistemas multimedia, ninguno ha impedido que la gente siga comprando BMW en masa. La firma alemana, ahora, espera que la controversia en torno a su nuevo modelo de suscripción para ciertas características de lujo también desaparezca.
Cuando se supo de esta noticia hace unas semanas, hubo una rápida reacción a los servicios de suscripción propuestos. BMW se enfrentó a la peor parte después de que una opción para una suscripción de asiento con calefacción, accidentalmente, estuviera disponible para los clientes de Corea del Sur. El fabricante alemán corrigió dicho error, según Bloomberg, pero sí hubo una ola de reacciones negativas ante tal propuesta, una serie de reacciones que BMW defiende que se disipará con el tiempo.
BMW le explicó a Bloomberg que sus servicios de suscripción permitirían mayor flexibilidad en sus vehículos, como pagar los asientos con calefacción solo en invierno. BMW no tendrá una suscripción de este tipo, aparentemente, en todos los países, pero funciones como la capacidad de montar una cámara en el salpicadero y o el arranque remoto del motor sí que pueden ser un extra. Otros servicios también podrían terminar detrás de un muro de pago en el futuro, como más potencia “desbloqueable”.
Por ejemplo, BMW está avanzando con un servicio de suscripción de asientos con calefacción en Reino Unido, que cobrará a los propietarios 15 libras al mes por la función (17,80 euros). Los propietarios pueden ahorrar pagando 150 libras (178 euros) por un año o 250 libras (296 euros) por tres, y pueden obtener acceso ilimitado por 350 libras (415 euros), dice Bloomberg. El fabricante cree que los servicios de suscripción podrían generar hasta un máximo de 5.000 millones de euros en ventas para 2030.
Sin embargo, al igual que ocurre con las características de asistencia al conductor con confusos nombres, BMW está aprendiendo de la manera más difícil que la mala comunicación para las tecnologías modernas puede llevar a unos clientes descontentos. BMW también fue criticado en su día por tratar de vender Apple CarPlay como una suscripción en 2019 en un momento en el que muchos modelos básicos ya tenían esta característica como elemento de serie. Veremos si realmente, la suscripción aquí tiene aceptación.
Fuente: Bloomberg