Tal vez sorprenda o no esta afirmación, porque puede que seas una persona extremadamente pulcra o un completo dejado, pero el interior de un coche suele estar más contaminado que un retrete. Así lo manifiesta un estudio encargado por Scrap Car Comparison y ejecutado por los investigadores de la Facultad de Biociencias de la Universidad de Aston en Birmingham, Reino Unido.
Si comes regularmente en el coche, es posible que desees reconsiderar esa decisión, ya que el estudio ha descubierto que la mayoría de los vehículos pueden estar más sucios que el inodoro promedio. Los investigadores del centro tomaron muestras de dos inodoros y cinco vehículos, incluido uno que tenía tan solo dos años. Lamentablemente, los resultados son desagradables, ya que todos los coches del estudio tenían bacterias fecales. Sorprendentemente, los niveles más altos de dichas bacterias fecales se encontraron en el maletero.
¿Por qué? ¿Es que acaso la gente mete a sus mascotas en la parte trasera para que hagas sus necesidades fisiológicas? Bueno, los investigadores notaron que esta es la misma zona donde la mayoría de las personas transportan sus compras. Estas bacterias de origen fecal también se encontraron en generosas proporcionas en el asiento del piloto, algo que es un poco menos sorprendente. Por supuesto, sabiendo eso, es posible que ya no quieras comer esa patata frita que se cayó sobre tu asiento; sí, con restos de sucias bacterias…
En cuanto a los lugares “más guarros” de los coches, el maletero fue el claro ganador, ya que allí se encontraron 1.425 bacterias. Le siguen el asiento del conductor (649 bacterias), la palanca de cambios (407 bacterias), el asiento trasero (323 bacterias) y el salpicadero (317 bacterias). Curiosamente, una de las áreas más limpias es el volante. Esto es un poco sorprendente, dado que los conductores lo tocan continuamente, aunque esto puede explicarse por el mayor uso de desinfectante para manos durante la pandemia de coronavirus.
“El maletero es, a menudo, el lugar donde ponemos la compra cuando se va al supermercado, y con una reducción en el uso de bolsas de la compra, existe un potencial mucho mayor de arrojar artículos sueltos en el maletero de un vehículo para viajar casa. Con esto en mente, debemos ser conscientes de reducir el riesgo de este alimento asegurándonos de limpiar bien y suficientemente cualquier fruta, verdura u otro producto antes de comerlo”, ha declarado el Dr. Jonathan Cox, profesor titular de microbiología en la Universidad de Aston.
El pequeño estudio también encontró que cuanto más viejo es el vehículo, más bacterias es probable que tenga. Dicho esto, el doctor Cox señaló que “no deberíamos que preocuparnos demasiado”, pero la gente “debe tener en cuenta que no toda la suciedad es visible para que la percibamos”. Agregó que el estudio muestra que las personas deberían hacer un mayor esfuerzo para mantener sus coches limpios, ya que, “en última instancia, se trata de mitigar el riesgo de enfermarse”.
Fuente: Scrap Car Comparison