Ettore Arco Isidoro Bugatti nació un 15 de septiembre de 1881 en Milán (Italia). Fue empresario y fundador de la marca de automóviles Bugatti. Hombre extravagante, pero siempre de buen gusto, soñador, exigente y perfeccionista, logró cumplir sus sueños desde bien joven.
Ettore Bugatti nació en el seno de una acomodada familia de artistas; su padre fue un importante diseñador, sobre todo de muebles, tejidos, cerámicas y metales en el estilo Art Nouveau, y su hermano y abuelo fueron escultores. Esta pasión por el arte que vivió toda su vida, marcaría a Ettore Bugatti desde niño y le llevaría a estudiar posteriormente la carrera de arte en la prestigiosa Academia de Arte de Brera. Sin embargo, Bugatti siempre orientaba todas sus producciones y diseños hacia el mundo del automóvil.
De esta forma, en 1898, cuando trabajaba como aprendiz en la fábrica de bicicletas y triciclos Prinetti & Stuchi en Milán, construyó un triciclo con motor a nafta en cada rueda trasera. Su extraño e inédito diseño, hizo que tuviera mucho éxito y, a pesar de su temprana edad, Bugatti, rápidamente empezó a hacerse un hueco dentro del mercado.
Su primer vehículo
Bugatti estaba acostumbrado a una vida de lujo y sofisticación que le impedía contar con los ahorros suficientes para poder embarcarse en proyectos más ambiciosos y, por eso, en 1900 tuvo que acudir al Conde Gulinelli de la escudería Ferrari para que le prestara el dinero suficiente para construir el que sería su primer vehículo, el Type 1. Un coche de 3.0 litros con motor de cuatro cilindros y 660 kg de peso, que ganaría en varias ocasiones el Gran Premio de Milán y el Club de Automóviles de París, siendo considerado el vehículo más rápido de la época al alcanzar los 65km/h.
A partir de ese momento, la obsesión de Ettore Bugatti siempre fue lanzar al mercado el coche más rápido y potente. Desde 1902 hasta 1904, fabricó el Bugatti Tipo 3 y 4 y los de Tipo 5, 6 y 7 bajo el sello Dietrich-Bugatti.
Camino del éxito desde joven
En 1902 el Barón Eugène Dietrich, que era propietario de una fábrica de fabricación de coches en Niederdbronn (Alemania), le ofreció un puesto como director técnico en su compañía. Como todavía era menor de edad, su padre Carlo Bugatti firmó el contrato en su nombre. Bugatti entonces se traslada a vivir a Molsheim, Alsacia, para luego adoptar la ciudadanía francesa. Aunque el contrato de colaboración con Dietrich duró sólo dos años, este tiempo le valió para desarrollar nuevos modelos de vehículos que competirían en numerosas carreras.
1907 fue un año clave en la vida de Ettore Bugatti. Se casa con Barbara Maria Giuseppina Mascherpa, con la que tuvo cuatro hijos, y en septiembre empieza a trabajar en la prestigiosa Gasmotoren Fabrik en Colonia como Jefe de Ingeniería, donde siguió desarrollando motores. Por aquella época, en el sótano de su casa desarrolla un coche muy ligero, que poco después se comercializaría con su propio nombre. En 1909, termina antes de tiempo su contrato con la Gasmotoren Fabrik y se translada entonces a vivir a Molsheim (Alsacia). Allí alquiló una antigua tintorería en desuso que después se convertiría en una gran fábrica y empieza la producción del Bugatti T13, uno de sus grandes coches de carrera. En aquel tiempo, Bugatti fabrica también modelos para Peugeot (Peugeot Bébé), Rabag, Diatto y Crossley.
El estallido de la Primera Guerra Mundial marcó otro punto de inflexión en la vida de Bugatti. La familia se trasladó primero a Milán y luego a París, donde Ettore diseñó un 8 cilindros y un motor de avión de 16 cilindros. Cuando finalizó la guerra regresó a Molsheim (que ahora era territorio francés) y re-abrió la planta de fabricación en la antigua tintorería.
Continuó construyendo coches ligeros, elegantes y deportivos que le harían conseguir 412 victorias en diversas competiciones. A principios de la década de 1930, Ettore puso en marcha la producción de vagones motorizados Autorails, que contó con motores Royale, y en 1934 se inicia la producción del Bugatti Type 57, el primer coche con un chasis diseñado por el hijo de Ettore, Jean Bugatti. En esa época comenzaría la auténtica «edad de oro» de Bugatti, con la construcción de algunos de los modelos que, incluso hoy en día, siguen considerándose auténticas obras de arte.
Bugatti entonces se traslada a vivir a París, dejando la gestión de la planta a su hijo Jean. Sin embargo, tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial, la fabrica de producción de Molsheim es reubicada temporalmente en Burdeos.
Si la Primera Guerra Mundial supuso el despegue económico de la empresa, la Segunda Guerra Mundial significó tanto el declive de la fábrica como de su vida. El 11 de agosto de 1939 su hijo Jean muere en un accidente de coche mientras conducía un Type 57C modificado con batalla de 330 cm y motor del Type 57G, que había ganado las 24 Horas de le Mans el anterior 18 de Junio, tratando de esquivar a un ciclista, aunque hay diversas teorías conspiratorias en este sentido.
A raíz de la muerte de su heredero, Ettore abandonó los experimentos modernizadores de Jean (la tracción integral, la suspensión delantera independiente, el mando hidráulico de frenos…). Bugatti, anquilosado en sus ideas obsoletas, dependía del espíritu innovador y creador de su hijo, auténtico motor de la marca desde el comienzo de la década. La empresa acabó realmente al morir Jean.
El golpe de gracia fue la invasión alemana de Francia en 1940. Los nazis confiscaron la casa de la familia Bugatti y Ettore tiene que emigrar a Italia. Al finalizar la guerra, en bancarrota, deprimido y gravemente enfermo, fue acusado de colaborar con los nazis y sólo un mes después, el 21 de agosto de 1947 murió en París. La catula Bugatti, porpiedad del Grupo VAG, no se olvidó de él y el año pasado rindió homenaje a su fundador con el espectacular Bugatti Veyron Ettore Bugatti.
Vía: Bugatti.com