Los Ferrari 328 fueron los protagonistas de la marca del cavallino a mediados de los 80. Con su V8 de 3.2 litros de 270 CV estaba disponible tanto en la carrocería coupé (GTB) como en la targa (GTS). Precisamente la segunda configuración dio lugar a uno de los one-off más llamativos de la época. Se trata del Michalak Conciso, un ejemplar único (solo se hizo una unidad) que destacaba por su diseño y ligereza.
Fue una idea del diseñador alemán Bernd Michalak, que quiso convertir por completo un Ferrari 328 GTS con poco kilómetraje. Le quitó prácticamente todo, dejando apenas el tren de rodaje del modelo original. Se puso a trabajar en una carrocería de aleación de aluminio que tenía la particularidad de desprenderse por completo de las puertas y del techo. Tampoco tenía ventanillas y el parabrisas era reducido a su mínima expresión.
Vio la luz en el Salón de Frankfurt de 1993, donde sorprendió a todos los presentes por su atrevido diseño. Visto de frente ha sido comparado con un ornitorrinco por las formas redondeadas de su capó (que se asemejan al pico) y por los pequeños faros montados sobre unos pasos de rueda en color negro (serían los ojos). La zaga guardaba algo más de parecido con el modelo original, mantenía sus pilotos aunque rediseñaba el paragolpes.
El resultado era que este Michalak Conciso era un 30 % más liviano que el Ferrari 328 GTS de serie. De esta forma, el one-off que rondaría los 900 kg también conseguía mejorar en prestaciones. Conseguía acelerar de 0 a 100 km/h en 5 segundos y su velocidad máxima era de 278 km/h. Michalak se lo vendió a un coleccionista estadounidense y luego pasó a otro belga. El año pasado fue subastado por 109.250 euros, una ganga para tratarse de algo tan único. Ahora ha pasado por el programa de Jay Leno, donde se han podido ver en detalle algunas de sus peculiaridades.
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