Mini presentó en el Salón de Ginebra 2012 el nuevo modelo John Cooper Works (me encanta este nombre), el Countryman JWC. La firma inglesa aprovechó el lanzamiento del Countryman con tracción integral, hace un par de años, para desarrollar de la mano de Prodrive la versión de competición para el Campeonato del Mundo de Rallys. Pues bien, ahora llega la versión John Cooper Works, que con 218 CV en su haber, es el automóvil de calle más cercano al que compite en el Mundial de Rallys.
Mini ha incrementado la potencia sacándole algo de más jugo al cuatro cilindros 1.6 turbo, que incorpora novedades como la inyección directa y el sistema Valvetronic de BMW –regula de forma variable la apertura de las válvulas-. Los pistones y válvulas también se han «repasado» y se ha añadido un intercooler de mayores dimensiones para alcanzar los caballos mencionados y los 280 Nm de par –que llega a 300 Nm con la función Overboost-.
En cuanto a las prestaciones, y con respecto al Countryman Cooper S, mejoran en 6 décimas en el 0 a 100 kilómetros/hora –los alcanza en 7 segundos- y el consumo es de 7,2 litros. Por vez primeera en un JCW, monta cambio automático de 6 velocidades, aunque bien es cierto que aumenta el consumo hasta los 8 litros.
Pero la gran novedad de este modelo es que dispone por primera vez de sistema de tracción integral ALL4, que a través de un diferencial central puede transmitir hasta el 100% del par a cualquiera de los ejes en función de las necesidades. Esto debería mejorar sustancialmente la capacidad de tracción, uno de los problemas de los que adolecía el Mini Cooper JCW, y todo a pesar de contar con diferencial autoblocante. Además en esta versión se monta una suspensión específica con un tarado más duro y 10 milímetros más baja.
Llaman la atención de su exterior un kit aerodinámico, que le le dota de una imagen más agresiva y musculosa con faldones frontal y trasero y taloneras de diseño específico. Llantas de 18″ y el sistema de escape deportivo de doble salida redondean un conjunto que estará disponible en 7 colores y con variadas opciones de configuración.
En su interior, lleva unos asientos deportivos con tapicería negra con ribetes rojos, combinación utilizada en otras partes del habitáculo como en el volante o la funda de la palanca de cambios, así como múltiples placas JCW que crean una atmósfera más deportiva.
Se pondrá a la venta el próximo otoño y el precio será algo superior a la versión Cooper S, que cuesta 28.950 euros actualmente en nuestro país.
Galería de imágenes del Mini Countryman JCW: