Los precios de la gasolina se han desbocado. Son ya cinco semanas consecutivas sin parar de subir y de ahí que se haya superado su precio más alto de la historia, vigente desde hace una década. La gasolina está a un precio medio de 1,538 €/litro, un 1,18% más que la semana pasada. Si llenas ahora un depósito de 55 litros, has de gastarte 84,59 euros, casi un euro más (99 céntimos) que siete días atrás.
Estos datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea nos dejan con una subida del 4,2 % en el último mes. Si echamos la vista un año atrás, la la gasolina es un 25,3% más cara. Llenar ese mismo depósito es ahora 16 euros más caro. También ha subido mucho el diésel un 28,3% y los precios, marca su quinto precio más elevado desde que existen registros tras seis semanas subiendo: 1,422 €/litro, un 1,28% más que la semana anterior (también 99 céntimos como la gasolina) y un 5,8% más en un mes.
Desde noviembre de 2020, tras los meses más duros de la pandemia, el precio de los carburantes tradicionales no ha dejado de incrementarse. Y no solamente gasolina y diésel. El GLP (Gas Licuado de Petróleo), sube un 25 % respecto hace un año (0,852 €/kilo) mientras que el GNC 1,929 €/kg, cuesta más del doble que a principios de 2021, como avisamos.
La OCU alertaba a principios de año. De mantenerse la escalada de precios, esta organización prevé que el sobrecoste por hacer 20.000 km anuales será de 440 euros en el caso de la gasolina, de 340 euros el gasóleo… y nada menos que de 980 euros más con GNC.
¿Ocurre solo en España?
Los carburantes han siubido en todo el mundo. De hecho, en España son aún más bajos que la media de la UE. El precio de la gasolina es de 1,681 €/ litro, mientras que el del diésel es de 1,568 €/litro.
Los países con la gasolina más cara de Europa son Países Bajos (2,01 euros), Finlandia (1,888 euros) y Dinamarca (1,857 euros). El gasóleo más caro se encuentra en Suecia, (2,035 euros), Finlandia (1,811 euros) y Países Bajos (1,716 euros).
En el polo opuesto, repostan la gasolina más económica Bulgaria (1,240 euros), Polonia (1,282 euros) y Rumanía (1,319 euros). Lenar el depósito con gasóleo es más barato en Malta (1,21 euros), Bulgaria (1,267 euros) y Polonia (1,292 euros).
Los precios del petróleo, claves
El precio del barril Brent se sitúa en más de 90 dólares por barril, una cifra que no se alcanzaba desde 2014. En lo que va de año, el coste se ha incrementado más de un 15%.
Lo peor: no parece que vaya a detenerse. En Goldman Sachs indican que no tardará en costar 100 dólares (en el tercer trimestre del año). Esperemos que ahí se detenga, ya que otra financiera, en este caso JP Morgan, elucubra que si alcanza los 150 dólares se ralentizaría el crecimiento económico y se dispararía la inflación.
Después del inicio de la pandemia, cuando la actividad económica se detuvo (y la movilidad de personas), la demanda de carburantes no ha dejado de aumentar. Pero la oferta no. La OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), no parece dispuesta a aumentar la producción, manteniendo el incremento gradual en 400.000 barriles diarios para marzo de 2022. Haría falta más para estabilizar sus precios.
Es Asia el continente donde más sube la demanda y la transición energética no es tan rápida para ver un descenso del consumo. De hecho, para conseguirla es preciso emplear combustibles fósiles… y su precio podría demorarla más.
Pero el dato más preocupante es el escaso nivel de reservas, el más bajo desde 2020. Hay menos petróleo almacenado que nunca, sobre todo porque varios países, sobre todo Estados Unidos y China, liberaron esas reservas para presionar a la OPEP… sin éxito y ahora sin esa «bala» para gastar.
Además, se ha parado la producción en varios países por diversas causas (tecnológicas, geopolíticas o conflictos armados). Y el gas se ha encarecido muchísimo… que es imprescindible en sectores como el enérgético e incluso para producir diésel (mediante destilación fraccionada, calentando el petróleo bruto hasta los 400ºC).