El pasado mes el Parlamento Europeo hacía pública una estadística que señalaba a las carreteras europeas como las más seguras dell mundo, con una media de 49 muertes por millón de habitantes frente a las 174 por millón en el resto del mundo. Gracias a los avances en materia de seguridad vial, entre 2001 y 2017 el número de muertes en las carreteras de Europa se redujo un 57,5%.
No hay que conformarse y, de hecho, los últimos datos demuestran que esta tasa de mortalidad se está estancando. Para mejorarla, se han presentado ya nuevos sistemas de seguridad obligatorios en 2022 y se trabaja ya en mejoras de infraestructuras.
En el cuadro más abajo puedes ver que, de las víctimas mortales por accidentes, los pasajeros de turismos representaron el 46% del total de muertes. Otro tanto suponen los usuarios vulnerables de la vía pública, de los que el 21% corresponde a peatones, el 14% a motoristas, el 8% a ciclistas y el 3% a personas en ciclomotores.
La tasa española se encuentra en la media de la UE. Los datos son peores que los que encontramos en 2017 en Reino Unido, Suecia o Países Bajos, mientras que Rumanía, Bulgaria y Croacia arrojaron los peores datos.
A pesar de que son buenos datos, no podemos olvidar que 25.300 personas perdieron la vida y 135.000 resultaron heridas de gravedad en 2017. Y aunque los datos se mejoren… seguirá habiendo víctimas. Para mejorar la protección de las víctimas de accidentes de tráfico, el Parlamento aprobó el 13 de febrero una propuesta para mejorar la actual directiva de seguros de automóviles.
Las nuevas reglas garantizarán compensaciones justas para las víctimas, desalentarán el uso de automóviles sin seguro y garantizarán un tratamiento equitativo para los asegurados de diferentes estados miembros.
Mayor protección para las víctimas
En la actualidad, las víctimas de accidentes de tránsito en las que el asegurador del vehículo responsable es insolvente, no pueden recibir compensación ni sufrir retrasos en los pagos. Conforme a las nuevas reglas, la responsabilidad de la compensación en tales casos vendrá predeterminada por los estados miembros. La propuesta indica que la compensación se conceda en un plazo máximo de seis meses.
Los ciudadanos de toda la UE se beneficiarán del mismo nivel mínimo de protección. En caso de lesiones personales, las víctimas tendrán derecho a una cobertura de seguro mínimas (los Estados miembros podrán establecer cantidades más altas):
- 6.070.000 euros por accidente, independientemente del número de víctimas
- 1.220.000 euros por víctima.
- 1.220.000 euros por reclamación por daños a la propiedad, independientemente del número de víctimas.
Primas de seguro más asequibles
Las nuevas reglas instarán a las compañías de seguros a permitir que los historiales de reclamación sean transferibles, lo que permitirá que un consumidor que se mude a otro país de la UE continúe disfrutando de los mismos beneficios.
Esto debería significar que los ciudadanos europeos tendrán acceso a primas más ventajosas y posibles descuentos, independientemente de su nacionalidad o estado de residencia anterior. Independientemente, siempre conviene consultar un comparador de seguros para localizar las pólizas más adecuadas a tu nivel de ingresos y necesidades.
Acabar con los coches sin seguro
No cabe duda que conducir sin seguro es un problema que cuesta millones de euros y aumenta las primas para los consumidores que pagan. La propuesta del Parlamento permitiría a los estados miembros llevar a cabo controles de seguros transfronterizos sistemáticos a través de tecnologías discretas, como el reconocimiento de matrículas, e imponer sanciones.
Estas tres normas cubrirían la mayoría de los vehículos. Por el momento bicicletas eléctricas, segways y patinetes eléctricos serán excluidos ya que son más pequeños y causan menos daños a personas y propiedades. Los deportes de motor también se omitirán, ya que en general están cubiertos por otras formas de responsabilidad.
A partir de ahora, los eurodiputados tendrán que negociar las nuevas reglas con el Consejo antes de que entren en vigor. Una vez se implementen, la Comisión tendrá que evaluar su aplicación con respecto a los automóviles sin conductor.
Fuente: Parlamento Europeo