La historia de la última generación del Suzuki Jimny está siendo bastante peculiar. En los primeros meses tuvo tanto éxito que la demanda superó la producción y los compradores se vieron obligados a esperar. Luego tuvo que ser retirado del mercado europeo por sus elevadas emisiones y las multas que iba a tener que pagar la firma japonesa. Después se confirmó su llegada con la homologación de vehículo comercial para poder eludir ese problema de emisiones. Llega a España el Suzuki Jimny Pro 2021, que mantiene la filosofía introduciendo algunos cambios.
Al estar homologado como un comercial ligero N1, el Jimny Pro se asemeja más a un furgón que a un turismo convencional. Es un estricto biplaza que ha perdido la segunda fila de asientos y que deja su parte trasera despejada para ofrecer una zona de carga con suelo plano y rejilla separadora. De esta forma, se convierte es una herramienta de trabajo ideal para profesionales, gracias a su volumen máximo de 863 litros (33 más que la versión de pasajeros con los asientos abatidos) en esta parte trasera.
Que esté homologado como vehículo N1 furgón afecta en que no es obligatorio que pague impuesto de matriculación si va a ser utilizado para el ejercicio de una actividad económica (en caso contrario paga un 9,75 %). También hay que añadir que el Suzuki Jimny Pro tendrá que pasar la ITV con más frecuencia que otros turismos. Hay que hacerlo cada dos años cuando tiene entre dos y seis años de antigüedad, pasa a ser anualmente de los seis a los diez años y semestralmente a partir de entonces.
Otra limitación que tendrá el Suzuki Jimny Pro es que su velocidad máxima permitida es de 90 km/h en autopistas y autovías, y de 80 km/h en carreteras convencionales. De hecho, no será posible cambiar la homologación de N1 a M1. Tampoco es un gran problema, pues mantiene intactas sus capacidades todoterreno gracias a la tracción 4×4 AllGrip Pro conectable con reductora. También presume de ese chasis escalonado o de las suspensiones de tres apoyos con ejes rígidos.
Los ángulos todoterreno son de 37º el de ataque, 28º el central y 49º el de salida; de los más destacados del mercado. El motor tampoco cambia y ofrece el gasolina atmosférico de 1.5 litros y cuatro cilindros con una potencia de 102 CV y 130 Nm de par. Potencia suficiente para un modelo que apenas pesa 1.090 kg en orden de marcha y para alcanzar una velocidad máxima de 145 km/h. Con esta configuración homologa un consumo de 7,7 l/100km y unas emisiones de CO2 de 173 g/km.
A pesar de su vocación puramente profesional, sigue equipando algunos sistemas como el control predictivo de frenada (DSBS), el control de descenso y de retención o la llamada de emergencia para facilitar la vida del usuario. El Suzuki Jimny Pro ya está disponible en los concesionarios por un precio de 20.970 euros (sin impuesto de matriculación). Curiosamente, el único opcional que se puede elegir es la pintura «Verde Jungle» por un sobreprecio de 345 euros.
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