Cuando, allá por 2012 llegó por fin al mercado el Toyota GT86 (hermano del Subaru BRZ que probamos) la mayoría torció el gesto. El coche era lo esperado, un vehículo de tracción trasera, ligero y divertido de conducir, pero el precio se salía de los presupuestos de la mayoría de sus potenciales clientes.
Ahora, con motivo del Salón de Tokio, los nipones llegan con una sopresa bajo el brazo, el Toyota S-FR Concept, un prototipo de un pequeño deportivo de apenas 3.990 mm de longitud (1.695 mm de ancho y 1.320 mm de alto) con un interior de 2+2 plazas.
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Un tamaño similar al del Auris, del que no tenemos detalles mecánicos, más allá de que su motor delantero longitudinal se ha situado por detrás del eje delantero y envía su potencia a las ruedas traseras mediante una caja de cambios manual de seis relaciones).
Su diseño es deportivo, pero en absoluto agresivo, pues su carrocería está llena de curvas, buscando más las zonas redondeadas que las afiladas y una parrilla muy grande bajo el capó largo. Tiene pinta de buen chico, en definitiva… y no está demasiado lejos de un futurible modelo de producción.
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El interior, con muchos detalles propios de un concept es austero a la vez que deportivo (por dios, si algún día lo llevan a producción, que elijan otro diseño palanca de cambios). No falta la instrumentación digital, asientos de corte deportivo con buenas orejas…
Pero, lo más importante… ¿Llegará a producción el Toyota S-FR Concept? Mucho tendrían que cambiar los gustos globales, donde los deportivos tienen cada vez menos cabida… Aunque desde luego no todos los fabricantes opinan lo mismo (ahí está Ford) y siempre podemos pensar que no hay demanda porque no hay productos acordes con el potencial adquisitivo de los clientes a los que va dirigido.
En teoría al GT86 le queda vida comercial, aunque si por fin Toyota decide revivir el Supra, puede que tenga sentido prescindir del primero para tener un modelo accesible de este corte en su gama. Hay quien especula que, tras el acuerdo de Toyota y Mazda para compartir tecnología, podría contar con la plataforma del MX-5… ¿quién sabe?
Fuente: Toyota
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