El de Mate Rimac es uno de los casos de éxito más marcados en el mundo del motor. El joven emprendedor croata fundó su propia firma de superdeportivos eléctricos y triunfó hasta el punto de ser absorbido por Grupo Volkswagen, con el beneplácito de Porsche, para formar Bugatti-Rimac. Pero su legado no termina ahí y ahora ha fundado una nueva empresa de robotaxis. Verne es la firma que quiere explotar la conducción autónoma en Europa y ya tiene tanto fecha de salida como vehículos proyectados.
Mate Rimac ha llegado a acuerdos con firmas como Mobileye para conseguir su plataforma para vehículos autónomos de nivel 4, aunque ha querido ir un paso más allá. Mezcla los conceptos de un monovolumen con el de un coupé de tres puertas para dar vida a un biplaza muy llamativo y que hará las delicias de sus pasajeros. Le han dado mucha importancia a la comodidad a bordo y también al sentido de la propiedad, a pesar de que vayan a ser una flota de robotaxis para llevar a la gente del punto A al punto B.
Lo consiguen a través de la configuración del interior, permitiendo elegir la temperatura, la música, la iluminación o el aroma a través de la aplicación incluso antes de que el vehículo haya llegado. El espacio de las plazas es sobresaliente y que solamente haya dos asientos se debe a que la mayoría de viajes en taxi se hacen en solitario o en pareja. No se aburrirán, pues al frente les queda una pantalla de 43 pulgadas con la que poder disfrutar del viaje con todo tipo de opciones de infoentretenimiento.
Los robotaxis de Verne son completamente autónomos, no tienen volante ni pedales, aunque sí que hay un botón físico para que los pasajeros pueden iniciar y detener el viaje. El diseño exterior es realmente llamativo e integra todas las tecnologías necesarias. Eso se traduce en cámaras, radares y sistemas LIDAR (con sus mecanismos de limpieza integrados) para guiarse entre el tráfico.
Sobra decir que los modelos de Verne son totalmente eléctricos. La empresa promete un «Mothership», una nave nodriza a la que los autónomos volverán para ser recargados, limpiados e inspeccionados diariamente para que esté todo bajo control. El primer lugar donde se establecerán será la Zagreb natal de Rimac, en Croacia, para 2026. A partir de ahí también se planea expandirse por Europa y llegar a Reino Unido y a Alemania, además de dar el salto a Oriente Medio.
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