Ya habíamos tenido un breve contacto con el pequeño Mitsubishi Space Star, un coche a caballo entre los segmentos A y B, el de los coches urbanos, que llegó al mercado en el último trimestre de 2014. Entonces comprobamos que contaba con argumentos de sobra para hacerse un hueco en el mercado. A saber, un coche práctico para moverse por la ciudad, perfecto para convertirse en un coche secundario, de precio razonable, un mantenimiento que debería ser asequible y consumos bajos.
Llega el momento ahora de pasar una semana con el coche para descubrir sus puntos fuertes y débiles que pudiesen pasarsenos por alto durante la presentación del coche.
Exterior
Como te contábamos al inicio del artículo, el Mitsubishi Space Star es un microurbano que se acerca, con sus 3,71 metros de largo y 1,66 de ancho, al terreno de los utilitarios.
En este segmento la imagen cuenta mucho, y si no que se lo pregunten al líder del mercado, el Fiat 500 que ha arrasado en el mercado europeo desde que comenzó su comercialización en 2007. Ha sido tal su éxito que el resto de marcas han apostado al mismo caballo en sus últimas porpuestas del segmento: Renault Twingo, Peugeot 508, Toyota Yaris… Pero no, el Mitsubishi Space Star no sigue ese camino. Apuesta por la sencillez, para poder ofrecer el mejor precio.
Esto no significa que no se hayan cuidado los detalles de diseño. El frontal es bastante juvenial, con un paragolpes que integra los faros antiniebla y que incluyen la función de luz diurna. Sus formas están pensadas para permitir un flujo del aire lateral más sueva. Los separa la parrilla que hace respirar al motor, aunque también hay una entrada de aire horizontal justo bajo el logo de Mitsubishi. Completan el frente unas óticas halógenas, generosas en su tamaño y que integran los intermitentes.
Cuando nos vamos a la vista lateral, además de observar que cuenta con cinco puertas, nos damos cuenta de la apuesta por la sencillez, ya que cuenta con pocas líneas de expresión, sin demasiados aditivos. Como es habitual en este segmento, los voladizos son muy cortos y las llantas de 15 pulgadas no se ven extremadamente pequeñas, además de que ahorraremos un buen dinero tanto en gasolina (son de 175 mm de ancho) como a la hora de cambiarlos.
Las lunas de las puertas traseras vienen tintadas de serie, y los retrovisores, con intermitentes LED integrados, cuentan con reglaje eléctrico y están calefactados, algo poco habitual en un coche que apuesta por tener un precio asequible.
En las fotos no puede apreciarse, pero la parte frontal es más ancha que la trasera. De este modo se produce una mejora aerodinámica, gracias a esa forma de gota que destacan todos los estudios aerodinámicos desde los años 30, con el Schlörwagen. De la misma forma, los ángulos traseros son más agudos para ofrecer menos fricción y estabilizar el coche. Lo podemos apreciar en los laterales del paragolpes traseros, muy marcados y con un corte recto.
También ayuda en ese sentido la caída del techo, que cuenta con un alerón con unas curiosas formas. Me recordaron algo en la presentación pero no caí entonces. Luego, con el coche ya más tiempo, recordé los apósitos que imitan a las langostas para mejorar la aerodinámica.
Interior
El interior del Mitsubishi Space Star está homologado para cinco pasajeros, punto a su favor, ya que la gran mayoría de sus rivales sólo pueden llevar a 4 personas. El puesto de conducción es amplio y sus asientos cómodos, aunque no sujetan demasiado el cuerpo. Otorgan una cierta altura para la conducción (no se pueden regular en altura) y un tapizado sencillo pero suave.
Los traseros tienen la particularidad de tener una base completamente lisa, que permiten acoplar fácilmente y con comodidad a 3 pasajeros en la zona trasera, además de contar con respaldo partido en configuración 60/40.
Sorprende la habitabilidad interior del modelo, con el asiento regulado para mi altura, en la plaza trasera correspondiente me encuentro con que no solo entro, sino que aún me sobra algo de espacio, algo inaudito para su tamaño. El alto y ancho sigue la buena línea del resto y se muestra espacioso en todas sus cotas.
Sí, puede que se haya escatimado algo en los acabados de los materiales del interior, pero por lo general los ajustes son buenos y el aspecto mejor. Contrasta con algunos elementos, inauditos en el segmento, como el volante multifunción (el mismo que equipa el Mitsubishi Outlander, sin ir más lejos). Está forrado en cuero, así como el pomo de las palanca de marchas, con un tacto realmente agradable. Eché de menos en el volante un mando para manejar el ordenador de a bordo. Para manejarlo hay que meter la mano entre el volante (sobre todo en una prueba así, en la que se miran consumos y otras variables a menudo), lo que no es lo mejor desde el punto de vista de la seguridad.
En general, el tacto de los botones y interruptores es muy suave y agradable. Se nota que han empleado piezas de otros modelos de gama alta. La consola central, tiene un diseño en color “piano black” que no gustará a los más maniáticos de la limpieza. Puede que alguien eche de menos un navegador o una pantalla multifunción, pero el equipo de sonido, aunque sencillo, cumple su cometido y cuenta con entrada USB y Aux.
Un poco más abajo tenemos la toma de 12v y un par de huecos para bebidas. Junto a estos tenemos otro detalle de agradecer. Si al entrar en el vehículo no sabes donde poner la llave del coche, no te preocupes, ya que tiene una base especifica para ello, que además sirve para arrancar el coche cuando te quedes sin pila en la llave (el Space Star cuenta de serie en el acabado Motion con acceso y arranque manos libres), otro detalle más que añadir a la lista.
Maletero
El maletero del Space Star anuncia 235 litros de capacidad, una cifra correcta para su segmento, más que suficiente para guardar la compra o incluso meter el carrito del niño y alguna bolsa extra (comprobado). Si abates los respacldos de los asientos traseros (para lo que hay que tirar de un tirador), la capacidad de carga hasta los 599 litros.
Los acabados no son demasiado buenos en esa zona. El suelo del maletero es fina placa de contrachapado forrado de moqueta en la base. Bajo el piso podemos encontrar el kit reparapinchazos… aunque da la sensación de que podría cobijar una rueda de respuesto. Todo sea por ahorrar peso… algo que podemos observar también en la bandeja. Parece de papel de lo ligera que es. Creo que nunca antes había tenido en mis manos una bandeja trasera que pesase menos.
Equipamiento
Cuando acudimos a la presentación del Space Star en España ya te contamos que existían dos niveles de equipamiento bastante cerrados (el único extra es la pintura metalizada, por unos 300 euros. Cada nivel de acabado va ligado a una de las motorizaciones existentes:
- Mitsubishi Space Star Challenge: Se asocia al motor 1.0 precio es de 8.600 euros cuenta ya de base con bastante equipamiento de serie entre los que destacan: los retrovisores exteriores de regulación eléctrica, sensor de presión de neumáticos, luz diurna, airbargs de cortina, control de tracción y estabilidad, sistema de asistencia en la frenada, indicador Eco y de cambio de marcha (Eco Drive), aire acondicionado con filtro de polen y Start & Stop (AS&G)
- Mitsubishi Space Star Motion: El acabado tope de gama, al que corresponde esta unidad, apenas cuesta 900 euros más y suma los retrovisores calefactables con intermitentes LED y en color de la carrocería, llantas de aleación de 15 pulgadas, volante y pomo en cuero, antinieblas delantero, sensor de luces y lluvia, climatizador automático, sistema bluetooth manos libres con mando en el volante, botón de arranque del motor, cristales traseros oscurecidos y levalunas eléctricos traseros.
Motor
El Mitsubishi Space Star podrá elegirse con dos motores de gasolina y tres cilindros con tecnología MIVEC (el sistema de sincronización de válvulas de control electrónico de Mitsubishi). Ambos van asociados a un cambio manual de cinco marchas. En otros mercados está disponible con un cambio automático de tipo CVT. No cuenta (ni contará) con mecánicas diésel.
Nuestra unidad contaba con el más potente, el Mitsubishi Space Star 120 MPI: Esta mecánica de 1.193 cc rinde 80 CV de potencia y 106 Nm de par. Es capac de acelerar del 0 a 100 km/h en 11,7 segundos y mantiene el consumo en niveles bajos (4,3 l/100 km en ciclo combinado).
Por debajo se sitúa el Mitsubishi Space Star 100 MPI: El motor cubica 999 cc y genera 71 CV de potencia y 88 Nm de par máximo. Sus prestaciones son humildes: acelera de 0 a 100 km/h en 13,6 segundos y homologa un consumo combinado de 4,0 l/100 km
Los consumos tan bajos se logran, además de por su bajo peso (895 kilogramos) y excelente aerodinámica (0,32 Cx), por el uso de tecnologías eficientes, que la marca denomina ClearTec, que incluyen desde el sistema AS&G (un Stop&Start) a el sistema de frenado regenerativo.
Comportamiento
Así pues, vemos que el Space Star ofrece una inmejorable relación precio-equipamiento… pero toca ver cómo se comporta en su hábitat, los entornos urbanos. La marca puso a nuestra disposición una unidad con el motor de 1,2 litros de 80 CV, el 120 MPI Motion. Nada más arrancar vemos que el tricilíndrico no es el colmo de refinamiento y se transmiten bastantes ruidos y vibraciones al interior. Es algo habitual en este tipo de mecánicas, si bien hemos de decir que, a medida que aumenta la velocidad (que no las revoluciones) se va disipando.
En cuanto a la potencia, es suficiente para el cometido de este coche. Con 80 CV se puede enfrentar repechos y tramos de autovía sin tener que jugar demasiado con el cambio. Otro cantar son las recuperaciones. Sus largos desarrollos están pensados para optimizar consumos, pero no ayudan a ganar velocidad una vez que cae. El funcionamiento de la palanca no es muy directo, pero tampoco muy tosco.
Es de resaltar también la buena visibilidad del coche lo que, unido a sus dimensiones y un radio de giro de apenas 4,6 metros convierten las maniobras de aparcamiento en un juego de niños. La asistencia de la dirección del coche es agradable pero transmite poca información al conductor… aunque debemos reconocer que no prtende un tacto deportivo (en ningún momento la marca lo vende como tal).
Esto último que afirmamos lo confirma el tarado de suspensiones. Están pensadas totalmente en favorecer la comodidad de los ocupantes. Con una configuración es McPherson con barra estabilizadora en el tren delantero y barra de torsión en el posterior, apenas transmite irregualridades del terreno. Y me refiero a que uno puede subir un bordillo, o pasar los badenes de las zonas urbanas a cierta velocidad, que el coche ni se inmuta. Eso sí, a la hora de tomar una de las innumerables rotondas que salpican las zonas residenciales de España… ojo con ir algo más vivo de la cuenta. El balanceo es más que considerable, aunque de reacciones previsibles. En esto tiene mucho que ver el poco peso, ya que no se producen grandes inercias.
En cuanto a consumos del Space Star, durante la semana que tuve el coche, en el que realicé más de un 75% de los kilómetros en ciudad (con incontables pequeños viajes para llevar al niño a la guardería, al médico y hacer recados) el ordenador de a bordo marcó 5,9 litros/100 km sin realizar en absoluto una conducción eficiente. No son los 4,3 que homologa, cierto, pero no me parece complicado bajar de los cinco litros si se añaden más recorridos en vías de circunvalación a 90-100 km/h.
Opinión coches.com
Una vez aparcado el Space Star, nos alegramos de que Mitsubishi haya planteado sacar al mercado un producto así. Por un lado por ellos, porque ampliará la gama y disparará sus cifras de ventas. Sus previsiones apuntan a comercializar 20.000 unidades en Europa, de las que unas 2.000 serán en España. Para alcanzarla será clave el papel del canal de alquiladores, ya que suponen gran parte del volumen final. Si cumplen sus expectativas, sería el segundo coche más vendido de la marca, solamente por detrás del ASX.
Pero sobre todo nos alegra ver una apuesta así desde el punto de vista del consumidor. dentro de poco llegarán al mercado una legión de coches pequeños. El Peugeot 108, el nuevo Aygo, el renovado Citroën C1, además de los Renault Twingo, Smart Fortwo y Smart Forfour. Pero todas las novedades apuestan por derrotar al líder del segmento, el Fiat 500, con sus mismas armas: estética, personalización… para poder vender un producto más caro… y con mayor valor añadido para la marca.
Mitsubishi opta por ofrecer algo diferente: un coche ligeramente más grande (con un interior de cinco plazas y maletero óptimo) pero de dimensiones contenidas. Con un equipamiento de serie soberbio por el precio y unos motores solventes, que prometen un consumo contenido ayudados por el peso del coche y gran aerodinámica. Por todo eso, bienvenido Space Star.
- Relación precio-equipamiento
- Interior homologación de cinco plazas
- Comodidad de marcha y consumos homologados
- Sonoridad del motor
- Suspensiones demasiado blandas en curvas
- Equipamientos cerrados
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