Los coches nos fascinan y los coches especiales, todavía más. No hablamos de versiones limitadas de deportivos o cosas así, sino de coches capaces de hacer algo especial, como que vuelen o que sean capaces de moverse en el agua, como los coches anfibios.
Si nos lees a menudo también conocerás nuestra adoración casi enfermiza por las caravanas curiosas. Y sí, habíamos recopilado unas cuántas, pero estas de hoy combinan dos funciones: son caravanas convencionales y al mismo tiempo embarcaciones. Y no creas que son producto de la más alta tecnología, no. Estas caravanas anfibias existen desde hace mucho tiempo. Y las tenemos en vídeo.
La primera de ellas, en una grabación de 1955 en el río Lea en Broxbourne (en el condado inglés de Hertfordshire) es un invento del diseñador Alan Eckford, que por alguna razón se negó a aceptar las limitaciones existentes en las caravanas de la época. Su creación era tan ligera que un coche de apenas 8 CV de potencia podría remolcarla hasta el lado del río y luego, con la ayuda de unos amigos, colocarla en el agua. Para navegar bastaba con un pequeño motor fueraborda colocado en un lugar especialmente diseñado para ello y un timón.
En este segundo vídeo de 1963 conocemos un pequeño remolque llamado Nomad, que puede ser desmontado por la mitad. La inferior sirve como barca y con la otra conforma una pequeña caravana. Y debe de pesar muy poco, ya que con un pequeño Mini es suficiente para llevarla de un lugar a otro. El American Dream Trailer retomó esta idea hace no demasiado. Ideal para ir de pesca, como puedes ver:
Pocos años después, en 1968 se grababa otro vídeo en el Támesis. Una pareja detiene su coche y en el remolque que arrastran se encuentra el Caraboat. El hombre sin ayuda puede dejarla en el río, ante la mirada atónita de unos ancianos y ya están listos para disfrutar el té sobre el agua en un día típicamente inglés.
Fuente: British Pathe