Cuando se trata de las regulaciones existentes que hay para los niños, hay muchas cosas que recordar. Por ejemplo, ¿sabes dónde es el lugar más seguro para que se sienten en el habitáculo? ¿Y a qué edad pueden ir sentados al frente? Si no colocas o sujetas a tu hijo correctamente en el coche, podrías poner en riesgo su seguridad de su hijo, además de ganarte papeletas para recibir una multa de hasta 200 euros y la retirada de hasta tres puntos del carné de conducir.
Con esto en mente, hemos elaborado una guía rápida de preguntas frecuentes para ayudar a llenar los vacíos y asegurarnos de evitar multas y mantener a tu pequeño lo más seguro posible, al menos en base a la última normativa de la Dirección General de Tráfico (DGT) del 1 de octubre de 2015. Si bien la sanción económica puede ser el factor decisivo para colaborar con las normas de la DGT, es reducida teniendo en cuenta los riesgos que supone que viajen niños en el asiento delantero cuando son demasiado pequeños.
¿Dónde puede sentarse un niño en el coche?
La respuesta depende de la altura del niño y no de su edad. La DGT no recomienda que los niños viajen en el asiento del acompañante hasta que hayan alcanzado 1,5 metros de altura. Sin embargo, la ley estipula que deben medir más de 1,35 m. Si el niño no supera esta cota, debe sentarse en los asientos traseros, aunque hay tres excepciones a aplicar a esta regla. Una es si el coche solo tiene dos asientos. Otra, si los asientos traseros ya estén ocupados por niños de 1,35 m o menos. En este caso, se les permitiría viajar en el asiento del pasajero delantero.
La última excepción es cuando solo caben dos sillines dedicados en la parte trasera. Si llevas tres niños pequeños y solo se pueden instalar dos asientos para niños de forma segura en la parte trasera del vehículo, el niño adicional puede sentarse en la parte delantera. Si un niño viaja en el asiento del pasajero delantero, debido a una de las excepciones mencionadas anteriormente, debe sentarse sobre un sillín adecuado orientado hacia atrás y con el airbag desactivado. Dependiendo de la marca y modelo del coche, es posible esto último deba hacerlo un mecánico.
Los fabricantes suelen diseñar los airbags para proteger a un adulto que mide al menos metro y medio de altura y pesa, aproximadamente, 65 kilos. Incluso si un niño usa correctamente el cinturón de seguridad cuando viaja en el asiento delantero, es más probable que sufra lesiones con el airbag del copiloto que un adulto. Esto se debe a que un airbag se despliega rápidamente, en una centésima de segundo. A esta velocidad, puede desplegarse a una velocidad de más de 300 km/h, lo que proporciona una cantidad significativa de fuerza para un niño pequeño y ligero.
Los preceptos están recogidos en la modificación del Artículo 117 del Reglamento General de Circulación(cinturones de seguridad u otros sistemas de retención infantil homologados), realizado mediante Real Decreto 667/2015 de 17 de julio (BOE de 18 de julio de 2015). La modificación de dicho artículo dispone también que todos los sistemas de retención infantil se instalarán siempre de acuerdo con las instrucciones que haya facilitado su fabricante, en las que se indicará de qué forma y en qué tipo de vehículos se pueden utilizar de forma segura.
¿Cuál es asiento más seguro para llevar a un niño?
Lo más recomendable es que un niño se mantenga siempre en la parte trasera el mayor tiempo posible. De esta manera, como resultado de un choque, reducirá la probabilidad de sufrir alguna lesión grave por impacto del vehículo o del airbag. De hecho, si el asiento del medio tiene un cinturón de seguridad de tres puntos (ventral y diagonal), lo más seguro es colocar un sistema de retención infantil justo en ese lugar porque es el más alejado de la carrocería del automóvil.
¿Qué puedo hacer para incrementar la seguridad a bordo?
Cuando un niño mide más de 1,35 m y quiere viajar en el asiento delantero, los padres pueden protegerlo aún más tomando algunas medidas como mover el asiento delantero lo más hacia atrás y alejado que puedas de donde se desplegaría el airbag. La mayoría de los choques afectan la parte delantera, por lo que esta posición es la que tiene menos probabilidades de sufrir un impacto.
Aunque no haga falta tener que recordarlo por ser algo ya obvio en los días que corren, no te olvides de comprobar siempre que el crío se pone el cinturón de seguridad. Y haz que lo use de forma correcta, con la espalda contra el asiento para que esté más lejos posible del salpicadero. El cinturón de seguridad debe atravesar la parte superior del pecho, no el cuello. Un cinturón de regazo debe estar sobre el regazo, no sobre el estómago.
Los sistemas de retención infantil (SRI) llegan a evitar el 75 % de las muertes de niños y el 90 % de lesiones muy graves en caso de sufrir un accidente. Si no se llevan a cabo estas normativas, los menores de 2 años podrían sufrir lesiones de cuello generadas por el tamaño de la cabeza y la debilidad de la columna vertebral, en la cabeza (de 2 a 4 años) debido a que las vértebras no son demasiado fuertes para soportar desaceleraciones bruscas, o contusiones más fuertes se dan en la zona abdominal (de 4 a 12 años), puesto que corren el riesgo de sufrir hemorragias internas o una lesión abdominal.
Fuente: DGT