El túnel de lavado automático parece ser una alternativa fantástica a la hora de limpiar nuestro coche. Ahorra tiempo y molestias. Sin embargo, la experiencia ha demostrado que usarlos puede hacer más daño que bien. Pueden desteñir y arañar la carrocería, e incluso se ha demostrado que pueden afectar seriamente a los sensores del coche.
¿Cómo daña el túnel de lavado la carrocería del coche?
Pasar el coche por el túnel de lavado es similar a pintar el coche con un chorro de arena mojado. El problema no está realmente en las cerdas de los rodillos per se, así que no importa si el establecimiento las emplea o si en su lugar utiliza gigantes y flexibles esponjas espumosas. ¿Por qué? Pongamos un ejemplo: un todoterreno viene del campo cubierto de barro y su dueño decide quitarle la mugre en uno de los susodichos túneles de lavado.
El lodo y la arena están compuestos, principalmente, de pequeños trozos de roca, incluido el granito, que es extremadamente duro y abrasivo. Esa arenilla tiende a adherirse al aparato de limpieza del túnel que, después de un tiempo, puede ser similar a un papel de lija. La elevada velocidad de giro de los rodillos junto con la alta presión del agua se encarga de frotar la carrocería del próximo vehículo que acceda al túnel. Consecuentemente, aparecen los arañazos.
Puedes pasar noches y días puliendo el coche a mano, y arruinarlo en un solo viaje al túnel de lavado
Los túneles de lavado automáticos han ido sustituyendo progresivamente los cepillos abrasivos por tela, pero sigue absorbiendo suciedad que imprime sobre otros vehículos. En los coches con más años a sus espaldas, no se solía aplicar una película protectora a lo largo de la carrocería, a diferencia de lo que ya es un estándar en la industria automotriz. Esta delgada capa transparente no solo protege la pintura de arañazos superficiales, también aporta más brillo.
Cuando está capa empieza a desgastarse, es el momento en el que la pintura comienza a verse más opaca y pueden aparecer con más facilidad los arañazos. Entonces, los rodillos de un túnel de lavado, restregando toda su suciedad en la carrocería de coche, causarán miles de microarañazos, también llamados de araña o de remolino por razones bastante lógicas. Con el tiempo, este daño se acumula, empeorando exponencialmente el aspecto de nuestro coche.
La reparación de estas marcas se realiza a través de un proceso de corrección de pintura, es decir, puliéndolo. Este proceso reduce el grosor de la capa de pintura para nivelarla con los rasguños que se ven en la superficie. Es un método que se puede aplicar varias veces durante la vida útil de un vehículo, dado que, normalmente, suele haber bastante margen entre la última capa de pintura y la chapa. Eso sí, en un taller especializado puede costar más de 1.000 euros.
¿Es mejor el lavado con pistola a presión?
El lavado mediante pistola a presión tiene la ventaja de que no hay contacto físico. Tan solo usa un chorro de agua a presión mezclado con detergentes que son lanzados al coche. Con este método, la posibilidad de que preocuparse por daños cosméticos es menor. Sí, es más lento que pasar por el túnel de lavado e incluso más caro. Y en vez un secador industrial tendrás que usar un trapo si quieres conseguir un buen resultado, pero merece la pena.
Si la presión del agua de la pistola es muy alta, también puede dañar la pintura del coche. Al no haber contacto con la superficie de la carrocería, se hace necesario más presión, ergo la pintura del coche también se resiente. Nunca utilices una pistola de lavado a presión pegada a la carrocería. Además, muchas de estas máquinas utilizan componentes aún más abrasivos en sus jabones que los túneles de lavado con el fin de eliminar cualquier resto de suciedad adherida.
¿Puedes reclamar?
Si consideras que te continúa mereciendo la pena acudir al túnel de lavado, has de saber que en la mayoría de ellos se indica antes de entrar que “la empresa no se hace responsable de ningún daño que pueda ocurrir”. Si tienes el infortunio de salir con el coche dañado, es tu deber contactar con el gerente del lavadero e indicárselo. Ya sea legalmente responsable o no, puede ofrecer soluciones con el fin de mantener las buenas relaciones entre los clientes.
Sin embargo, quien sí es responsable de responder ante una incidencia es la empresa propietaria del túnel, tal y como recoge el Artículo 147 de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios. Lo aconsejable es dar parte a tu seguro del incidente efectuar una reclamación amistosa al propietario del túnel de lavado. Así que sí, tienes todo el derecho del mundo a reclamar y ellos a responder.
Mantener tu coche limpio y que el acabado se vea bien también puede significar un mayor valor de reventa cuando sea el momento de reemplazarlo. En igualdad de condiciones, un vehículo con la pintura desteñida, y un aspecto deslucido en general, se vende por entre un 10 y un 20 % menos que otro idéntico que se ha mantenido bien.
Fuente: Top Speed